El directivo de la escudería alemana comenta la situación que atraviesa su equipo y cómo esperan superarse. Pues saben bien que no hay varitas mágicas que reviertan la situación de un momento para otro. Toca trabajar y remar todos en la misma dirección, pues los milagros en la Fórmula 1 no existen y son muy conscientes de ellos. Sin embargo, el resultado de Australia les dejó con buenas sensaciones.
Toto Wolff:
"Tuvimos algunas semanas libres de las carreras, pero ambas fábricas han estado trabajando duro. Hemos tratado de maximizar este período, incorporando el desarrollo planificado al automóvil y extrayendo todo lo posible de nuestros aprendizajes hasta el momento. Australia demostró que estamos progresando, aunque debemos ser cautelosos acerca de leer demasiado en un solo resultado. Pero las señales en Melbourne aún fueron alentadoras y eso ha sido un buen motivador para todo el equipo de cara a esta brecha en el calendario".
"En las próximas carreras, queremos seguir dando pequeños pasos hacia adelante. El automóvil continuará evolucionando en las próximas semanas, a medida que aportemos rendimiento y mejoras a la pista de manera constante. Estamos emocionados de ver su impacto, pero sabemos no hay una varita mágica. Después de poco menos de un mes sin acción en la F1, todos están ansiosos por volver a la pista. Afortunadamente, tenemos mucho de eso por venir. Es una ventana ocupada en el calendario con cinco carreras en seis fines de semana, comenzando con Azerbaiyán".
"Las carreras en Bakú siempre son dramáticas y entretenidas. Es una pista desafiante con paredes cerradas, por lo que no hay lugar para errores. También tenemos nuestro primer fin de semana de F1 Sprint de la temporada con un formato modificado. Es un desafío interesante para nosotros, con solo una sesión de práctica para estar listos para dos sesiones de calificación y carreras repartidas entre el viernes, el sábado y el domingo. Con suerte, esto significará más emoción y acción para que disfruten los fanáticos".
