El que fuera mánager de Michael Schumacher, Willi Weber, se ha expresado de manera pública para aseverar que a día de hoy se encuentra completamente apartado de la familia del heptacampeón del mundo alemán por culpa de la portavoz de la misma, la Señora Kehm, quien considera que ha acabado con su relación a través de los diferentes medios de comunicación. Del mismo modo, afirma que no ha visto a Schumacher desde que sufriera el accidente de esquí: "La Señora Kehm -portavoz de la familia- ha destruido completamente nuestra relación a través de la prensa, ya que no ha sucedido nada por parte de Schumacher. Nunca he visto a mi antiguo discípulo y amigo desde su accidente de esquí", ha comentado en unas palabras a Motorsport Total.
Por otro lado, Weber explica que ha presenciado cómo Michael luchaba para que su hijo llegara a la Fórmula 1, ya que sabía con quién tratar y cómo gestionar cada movimiento: "Fui algunas veces a la pista de karts cuando Michael Schumacher estaba allí con Mick, que es donde dio sus primeros pasos en el deporte del motor. Tuve la impresión de que Michael estaba ansioso por llevarlo a la Fórmula 1 y gestionar el asunto como solía hacerlo él. Ese habría sido el final de toda la historia y le habría encantado. Michael siempre lo ha sabido todo. Sabe con qué equipos hablar y cómo funciona todo, ya que él mismo pasó por todas las experiencias. Esa era su ambición", señala.
Mick lo tendrá complicado
Entretanto, lamenta la presión a la que está siendo sometido Mick Schumacher por el hecho de ser hijo de una leyenda de la categoría, y además considera que irá incrementándose conforme avance en su carrera profesional, pues es inevitable que se le relacione con su padre, que es el piloto del mundo con más trofeos en su vitrina: "Con un padre que es una leyenda en el mundo del automovilismo, Mick tiene una pesada carga que soportar, ya que siempre lo comparan con Michael y se dice: 'Se llama Schumacher, así que tiene que hacer lo mismo que su padre'. Esto es, por supuesto, una gran carga para el joven. Si Michael todavía pudiera estar a su lado, todo tendría un simbolismo diferente, pero ahora, ante los ojos de la gente, Mick está esencialmente representando a su padre, y ahí radica el problema, pues todos le comparan y dicen que tiene que obtener los mismos resultados", ha proseguido el de Ratisbona.
Para finalizar, el exmánager de Michael asevera que lo que más ansía en estos momentos es ver al heptacampeón germano volviendo a ponerse de pie y poder abrazarlo. Y es que afirma que tuvo que hacer frente a la presión pública tras el accidente del expiloto de Ferrari: "He sufrido como un perro durante tres meses después del accidente, ya que la gente me decía: 'tú eres el descubridor, ¿cómo está Michael?... Desearía que Michael pudiera volver a ponerse de pie tan pronto como fuera posible y que pudiera abrazarlo; ese es mi deseo más querido en estos momentos", ha señalado para concluir.
