El piloto alemán, Sebastian Vettel, asumió la negativa de Ferrari, aceptó que la etapa había terminado, se marchó, pero guarda buenas palabras para la que fue su burbuja dentro del imperio rojo. Afirma que el equipo cambió mucho desde que llegó, pues considera que esos cambios son algo normal al haber cambiado a la gente que se encargaba de las diferentes áreas cuando aterrizó en Maranello. El de Heppenheim trata de dejar atrás una etapa en la que no todo salió como esperaba, no busca culpables, considera que hubo razones para lograr los aciertos que tuvieron, pero que también hubo razones para que existieran debilidades. Quizá solo fuera cuestión de falta de tiempo, tiempo que considera que sí tendrá Charles Leclerc para seguir trabajando en el objetivo de vencer con Ferrari y hacerse con el título. Sebastian abre un nuevo capítulo en su historia y se siente emocionado por ello.
¿Es diferente el equipo que deja respecto a cuando llegó?
"Muy diferente, obviamente comenzamos con diferentes personas a la cabeza, diferente personal, muy diferente. Creo que la atmósfera en el garaje seguía siendo la misma, el espíritu se mantuvo intacto y, obviamente, es una pena que no logramos lo que nos propusimos lograr. Pero hubo razones para las fortalezas y hubo razones para las debilidades en los últimos años. Yo diría que todavía fue un poco diferente. En algunas cosas el equipo evolucionó, en otras cosas tal vez todavía había espacio".
El libro de la F1 abre un nuevo capítulo para Vettel
"Está claro que Charles tiene mucho tiempo por delante con el equipo, mucho trabajo, veremos cómo evoluciona. Para mí, obviamente, el capítulo ha terminado y estoy comenzando uno nuevo con un equipo diferente, por lo que estoy muy emocionado".