El piloto neerlandés de Red Bull, Max Verstappen, ha querido zanjar cualquier polémica sobre su posible maltrecha relación con Daniel Ricciardo tras el incidente protagonizado en Bakú y ha asegurado que ambos mantienen una buena concordancia después de lo ocurrido. Asimismo, ha explicado que su máxima prioridad ahora es acudir a la sede del equipo para pedir disculpas por lo acontecido en el Gran Premio de Azerbaiyán, que desembocó en el abandono de los dos pilotos y, por ende, en el casillero de puntos en blanco para Red Bull de cara a Barcelona, próxima cita del Campeonato.
"Evidentemente, hablamos sobre lo ocurrido. Daniel y yo estamos completamente bien el uno con el otro. Ambos podemos ver que lo que sucedió no es bueno para el equipo. Ya habíamos tenido antes algunas batallas difíciles, pero todo estaba bien. Nuestro final en Bakú fue duro, pero justo. Ahora obviamente necesitaremos ir al equipo en Milton Keynes y pedir disculpas, aunque debemos mantener una actitud positiva, porque creo que tenemos muchas posibilidades de cara a Barcelona. Contamos con muchas actualizaciones para el coche, y todo se ve muy bien", ha comentado en unas declaraciones concedidas al canal de televisión Servus de Red Bull.
Tienen que estar más unidos que nunca
Por otro lado, Verstappen reconoce que habló detenidamente con Ricciardo después del accidente, y al mismo tiempo añade que es algo que no debe repetirse, tanto por el bien del equipo como por el de los propios pilotos: "Hablamos mucho entre nosotros después del accidente. Ambos estábamos muy decepcionados, así que no creo que cambie nuestra relación. Obviamente es realmente malo para todo el equipo por todos los puntos que perdimos. No hay lugar para un choque con tu compañero de equipo. Algo así no debería volver a suceder; simplemente no debe producirse. Pueden acaecer incidentes, pero obviamente no con tu compañero de equipo. Tenemos que pensar en la escudería como un todo, y al final del domingo no lo hicimos", ha concluido.
