Tras lo sucedido con Charles Leclerc en la Q3 en Mónaco el pasado fin de semana se plantean estudiar alguna sanción para quien provoque bandera roja. El Ferrari tocó las protecciones y acabó paralizando la sesión, sesión que ya no se relanzaría porque no quedaba tiempo, eso lastró el segundo intento de pilotos que venían mejorando su tiempo, incluso para arrebatar la pole al piloto monegasco de la escudería de Maranello. Es inevitable haber pensado al verlo en ese momento pensar en que pudo haber sido algo premeditado por parte del Principado ya que no venía mejorando sus sectores. Además, nos vienen recuerdos de veces anteriores como cuando Michael Schumacher aparcó en la Rascasse con su Ferrari o Nico Rosberg en Mirabeau con su salida en 2014. Pero tras evaluar los daños y la repercusión que tuvo ese impacto, es lógico considerar que no fue deliberado, así también lo consideró Michael Masi. Aunque a consecuencia de lo sucedido tratarán de pensar en posibles sanciones por si ven que esto se repite en un futuro y la acción se considera deliberada. Por el momento ya anuncian que van a estudiar la posibilidad y toman ejemplo de la IndyCar y otras competiciones internacionales de la FIA.
Michael Masi afirma que ya piensan en posibilidades
"Como todo, cuando algo surge, la FIA, la Fórmula 1 y los equipos lo miran todo y lo consideran. Lo cierto es que conozco la norma de la IndyCar, que también la aplican en otras series internacionales de la FIA y en campeonatos nacionales de todo el mundo. Lo estudiaremos y, junto con todas las partes interesadas, determinaremos si es adecuado o no. Después de haberlo examinado, de haber mirado los datos y de haber escuchado la radio del equipo, no creo que ningún piloto salga a dañar gravemente su coche hasta ese punto, en ninguna circunstancia, por las consecuencias que pueden derivarse de ello".