La escudería famosa por lucir monoplazas de color papaya en las últimas temporadas teme que las mejoras introducidas a lo largo de la última temporada sean negativas de cara a 2024. Y es que a medida que el equipo ha ido introduciendo cambios también han detectado que los errores de los pilotos han aumentado. Quizá ese camino de búsqueda hacia las mejoras hace que la conducción se vaya complicando de forma exponencial y eso hace que los pilotos acaben cometiendo más errores. Andrea Stella ha estado hablando sobre ello, trabajan en el desarrollo de su nuevo coche sin querer inculcarle aquellos cambios que les han hecho tomar un rumbo no del todo deseado.
Stella lo tiene más que claro
"A menudo es difícil entender dónde está el elemento motriz o si hay un elemento de ingeniería. ¿Hay alguna característica del coche que lo haga tan llamativo, tan impredecible en algunas circunstancias? Lo cierto es que, en nuestro informe de clasificación teníamos razón en el hecho de que recientemente hemos tenido algunos problemas de conducción que parecían ser más frecuentes de lo normal. ¿Hay algo que debamos investigar? ¿Hemos incorporado en este desarrollo, que sin duda proporcionó un buen agarre, algunos elementos que posiblemente indican que el coche simplemente está perdiendo demasiado agarre demasiado rápido en algunas condiciones?".
"Esta es una hipótesis, esto no tiene nada que ver con la evidencia. Pero se trabaja según hipótesis para poder examinar los datos, examinar la información con una clave. Sin duda, esa es una clave que utilizaremos en los próximos días para analizar qué estamos aprendiendo de estas situaciones. Estamos contentos con lo que vemos en términos de velocidad máxima. En todo caso, sabemos que nos queda trabajo por hacer en el efecto DRS, especialmente en el ala que estamos utilizando. Es un ala que proviene de un diseño relativamente antiguo en el que no pudimos abordar el DRS de manera efectiva".
