Tras la salida forzosa de Nikita Mazepin del equipo norteamericano a principio de año, Kevin Magnussen había sido el elegido para subirse a ese asiento que estaba libre. El danés ha sorprendido desde el primer momento, fue capaz de adaptarse rápidamente a los monoplazas de la nueva normativa y su rendimiento ha sido realmente bueno, especialmente en la mitad primera de temporada. Debido a la falta de mejoras en el coche, no pudo lograr resultados tan buenos como en el primer tercio, por lo que es un factor a tener en cuenta de cara a 2023 y así alcanzar un nivel más alto de competitividad.
Guenther Steiner:
"Cuando Kevin volvió, sumó puntos en su primera prueba y tuvo al equipo detrás de él. Después del parón de verano, tuvo dificultades y no sabemos por qué, necesitamos analizar esos altibajos. Esperamos que el próximo año podamos estar más estables para tener un buen rendimiento todo el tiempo. Estamos ilusionados para el próximo año".