En el pasado fin de semana de competición, Carlos Sainz no había estado al nivel de su compañero de equipo en ninguna de las sesiones importantes, ni en clasificación, ni en carrera. Aunque el ritmo del monoplaza haya sido competitivo, tal y como lo había demostrado Leclerc, el español no tuvo la confianza necesaria para explotar todo el rendimiento y estar peleando contra el otro Ferrari y los Red Bull en los puestos de cabeza. Después de esa cita del calendario, la Scuderia estuvo trabajando para entender las causas de que el Cavallino no respondiera según las exigencias del piloto.
Carlos Sainz:
"El fin de semana de Bakú fue difícil, no por el resultado en sí, sino porque no tuve buenas sensaciones. Hemos analizado todos los datos y creemos que entendimos los motivos por los que no estuve totalmente cómodo en el coche. Quiero salir a la pista para confirmar lo que nos reflejan los datos. Quiero volver al nivel de confianza que había tenido en Melbourne, donde fui capaz de tener un ritmo consistente durante toda la carrera".