La controversia sigue girando en torno a Sebastian Vettel y los comisarios tras el Gran Premio de Canadá. El último en hablar sobre la sanción al piloto alemán ha sido el director general deportivo de la Fórmula 1, Ross Brawn, quien asegura que la determinación se llevó a cabo de manera objetiva, acabando así con algunos comentarios que señalaban el posible favoritismo hacia Hamilton y Mercedes. Del mismo modo, comprende los sentimientos del tetracampeón de Ferrari, ya que en ese momento vio cómo se le escapaba una victoria por la que había trabajado sin descanso durante todo el fin de semana: "No hay nada de malicia en una decisión así. Ninguno de los que tienen el papel de comisario tiene intenciones ocultas; los aficionados pueden estar seguros de eso. Puedo entender la decepción y frustración que sintió Vettel, y que seguro sigue sintiendo en estos momentos, ya que cree que le robaron una victoria merecida, pero también conozco el trabajo tan difícil de los comisarios, que deben tomar decisiones en muy poco tiempo y dar con un veredicto que al fin y al cabo puede afectar al resultado de la carrera", ha explicado en su valoración del Gran Premio de Canadá.
Mientras tanto, Brawn entiende el revuelo que se ha originado tras esta decisión, pues, como bien afirma, ni en deportes como el fútbol, en el cual la tecnología de última generación está muy presente, hay consenso, por lo que en la Fórmula 1, donde las decisiones son humanas, la controversia generada es aún mayor. Como posible solución, señala que se debería trabajar para permitir a los comisarios razonar sus decisiones, ya que así se crearía menos polémica: "Entiendo lo complicado que es para los aficionados comprender por qué el piloto en el escalón más alto del podio no es el que cruzó la línea de meta el primero. Por eso la transparencia es importante respecto a la explicación de las decisiones de los comisarios, sobre todo en un deporte tan complejo es la Fórmula 1. Lo es en el fútbol, en el que a pesar de que existe el VAR, se discute sobre si hubo mano y sobre si se debería castigar o no. La verdad es que podría ser útil trabajar con la FIA en soluciones que permitan que los comisarios expliquen sus decisiones a los aficionados y que les cuenten cómo han llegado hasta ellas", ha continuado.Cauto con su punto de vista
Por otra parte, prefiere no posicionarse respecto a la sanción, ya que su cargo se limita a otros asuntos: "No quiero dar una opinión sobre la determinación porque en mi posición sería incorrecto hacerlo. Respeto mucho el trabajo de los comisarios y su profesionalidad, y pienso que son los primeros a los que les gustaría ver una carrera que no se decide por una penalización. Lo más importante del fin de semana es que los seguidores disfrutaran del pilotaje clásico de Vettel, que quizás no veíamos desde el Gran Premio de Bélgica. Ferrari estuvo en forma en Montreal, donde pudieron contar con un piloto de la clase y el talento de Sebastian, que rindió al máximo el fin de semana pasado", ha añadido a modo de conclusión.