Desde Williams saben que la de Arabia será una pista diferente y deben aprovechar al máximo su tiempo para prepararse. Dave Robson ha sido el encargado de poner voz a las sensaciones de la escudería de Oxfordshire, algo que viene siendo ya habitual. Sus resultados en Baréin no fueron nada mal, pero saben que Yeda es harina de otro costal y por ello no se confían. En lo que sí confían es en su trabajo y en exprimir al máximo todo el tiempo que tengan disponible para rodar y acumular información de cara a las sesiones importantes del fin de semana.
Dave Robson, jefe de rendimiento de Williams:
"Regresamos a Yeda para la segunda carrera de la temporada 2023, Si bien el circuito ha sufrido algunas revisiones sustanciales desde el año pasado, conserva su carácter fundamental y ofrece un desafío muy diferente a la pista de Baréin. Disfrutamos de un par de semanas productivas en Baréin y pudimos sacar muchos aspectos positivos del fin de semana de carrera. Ahora nos enfrentamos al desafío de adaptar rápidamente el coche al circuito Yeda Corniche, que es mucho más sensible a la resistencia que Baréin".
"Hay un par de curvas complicadas en el circuito, que ponen a prueba seriamente al coche y a los pilotos. Dado que cada vuelta supera los 6 km, hay pocas oportunidades de practicar estas curvas antes de la sesión de clasificación. Al igual que el último evento, las sesiones clave tienen lugar por la noche y tendremos que estar atentos a los cambios en el viento y la temperatura después de la puesta del sol. La superficie de la pista es mucho más suave que en Baréin y Pirelli ha proporcionado compuestos de neumáticos más blandos para este evento. Esperamos abordar este carismático circuito urbano y mejorar nuestra comprensión de FW45".