Desde el primer momento en el que salió a la pista, el australiano estuvo disfrutando de esta pista semiurbana, ya que la F1 no pudo viajar allí en los últimos dos años. Lo más positivo de hoy fue que los equipos pudieron rodar con los neumáticos de seco y probar las nuevas piezas porque mañana se espera que la lluvia entre en juego y dé la vuelta a todo.
Ricciardo considera que fue capaz de alcanzar un ritmo competitivo sin demasiado esfuerzo, lo que es alentador de cara a las sesiones posteriores. Con lo visto hoy, se ha comprobado que la base del monoplaza es sólida, pero todavía falta mucho para que esté totalmente optimizado.
Daniel Ricciardo:
"He echado mucho de menos esta pista después de no haber venido en dos años. Creo que alcanzamos el ritmo muy rápido y las señales han sido buenas. Veremos qué sucede con la meteorología, pienso que tuvimos suerte por tener un día en seco, pero veremos qué nos depara mañana. Podría ser completamente diferente, pero hoy hemos tenido un buen comienzo. Esperamos hacer más ajustes para luego encontrar más velocidad".