El Gran Premio de Bélgica será el punto de partida de la segunda etapa de la temporada después de estas tres semanas sin Fórmula 1. El mítico circuito de Spa-Francorchamps es el escenario perfecto para volver a oír los rugidos de los monoplazas y así afrontar esta nueva fase. La escudería de Kannapolis quiere resarcirse tras los numerosos contratiempos que sufrieron hasta Hungría, por lo que su meta a corto plazo es recuperar el terreno perdido e intentar ser tan competitivos como en 2018.
No obstante, los problemas con los neumáticos sido su principal hándicap y por este motivo no lograron los resultados esperados. La parte negativa es que no saben a ciencia cierta por qué en las pistas poco favorables son rápidos y en las que deberían ser competitivos no lo son. Aunque no sabían cómo solucionarlo, parece que han encontrado algo para mejorar. En las últimas carreras, Guenther Steiner afirmaba que prefería tener un monoplaza malo a uno que tuviera tantos problemas, ya que sería más sencillo. Aunque la parte positiva es que Romain Grosjean y Kevin Magnussen rodarán con la actualización probada en Alemania en este fin de semana en Bélgica, lo que les ayudará a dar un paso adelante. A pesar de tener esta mejora en el VF-19, desde el equipo son conscientes de que su situación actual no es fácil porque tienen que alcanzar a sus rivales y superarles, por lo que el esfuerzo será más que notable. Sin embargo, la filosofía de Haas es lograr buenos desenlaces carrera tras carrera y después ya verán cuál es su posición final en el Campeonato de Constructores.
Guenther Steiner, director deportivo de Rich Energy Haas:
"Es positivo haber tenido algunas semanas para despejar la mente y así ver qué necesitas hacer para la segunda mitad de año. No es una nueva temporada, pero esperas recuperarte un poco y esperar que algunas cosas se hayan solucionado. Todo es posible [respecto a luchar por el quinto puesto en el Campeonato de Constructores], pero es difícil que nuestro coche funcione bien en carrera y es ahí cuando se puntúa. Sin embargo, probaremos todo lo que podamos. Ojalá, consigamos buenos resultados y luego veremos cómo terminamos en el Mundial".
"La carrera de Hockenheim fue bastante bien y era la primera vez que llovía. Desde Dirección de Carrera tomaron la decisión correcta tomando la salida en parado y estuvimos de acuerdo. Si llueve en Spa, las condiciones determinarán si la salida es en parrilla, una salida rodando o si fuera en seco al final. De todas formas, no tenemos la previsión meteorológica para Bélgica. Para esta carrera, llevaremos un coche mejorado, el que rodamos en Hockenheim. Hemos aprendido bastante del monoplaza e intentamos mejorarlo después de cambiar algunos componentes. Ambos coches contarán con la misma especificación y ojalá podamos aprender más. No obstante, el enfoque ha cambiado parcialmente para el monoplaza de 2020. Necesitamos ver qué llega del túnel de viento y las mejoras que hacemos en el coche de 2019, aunque no lo sabemos todavía".
"[Respecto a la variedad de circuitos], pienso que tenemos una buena variedad porque tenemos clásicos, semiclásicos y también nuevos, por lo que siempre es emocionante. Por ejemplo, Zandvoort es una pista clásica, aunque no se ha rodado durante bastante tiempo y ponerla en el calendario será interesante. El trazado en Hanoi será completamente nuevo y será importante para la Fórmula 1 y para Vietnam. Por otro lado, estamos hablando de añadir una carrera más, lo que significaría menos tiempo para hacer tests. Estamos intentando encontrar una manera para no tener parte del personal en rotación. Para tener 22 carreras, necesitaríamos reducir actividades en otras áreas para tener una carrera adicional".
