Aprovechando el error de Verstappen en la clasificación, Pérez había sacado partido a esta situación y consiguió la pole position. Estuvo al frente del pelotón durante la mayor parte de la carrera, pero la estrategia del neerlandés fue decisiva para arrebatarle la victoria a su compañero de equipo. Checo era consciente de que sería difícil mantener la primera plaza, sobre todo por el ritmo y el buen cuidado de neumáticos del campeón del mundo. Al final, un nuevo doblete para Red Bull Racing. Eso sí, la distancia en el campeonato sigue creciendo con el paso de las carreras.
Sergio Pérez:
"No siempre es bueno cuando lideras la carrera y acabas segundo. Sin duda, no tenía el ritmo de Max y es algo que vamos a analizar para ver cómo podemos mejorar. Cuando vi lo fuerte que venía Max, empecé a tener dificultades y pensé 'esto no pinta bien'. Obviamente, quería ganar, pero supe desde el principio de la carrera que sería difícil para nosotros. El rendimiento que Max había mostrado no era alcanzable para mí, por lo que tenemos que entender por qué. Es una lástima, pero el segundo puesto en un fin de semana duro no es un mal resultado. Quiero volver fuerte y recuperar mi nivel normal".