Lance Stroll se convirtió en uno de los protagonistas del Gran Premio de Singapur, pero no por los motivos que le hubiesen gustado: el canadiense acabó contra las protecciones de la última curva cuando trataba de completar su última vuelta lanzada en Q1. Como consecuencia, acabaría perdiéndose la carrera del domingo. Ante esta situación, eran muchas las dudas que sobrevolaban su participación en el Gran Premio de Japón, que tendrá lugar este fin de semana en Suzuka. Por suerte, parece que el número 18 finalmente sí estará defendiendo su asiento en los próximos días.
Todo vuelve a su cauce
Así lo ha confirmado a través de sus redes sociales: "Gracias por todos los mensajes de cariño. Listo para este fin de semana", rezaba la publicación. De este modo, el número '18' volverá a ponerse al volante del AMR23 para tratar de ayudar a Aston Martin a dar un paso adelante en el Mundial de Constructores, y es que el equipo de Silverstone ha ido cediendo terreno en las últimas citas hasta verse superado por Mercedes y Ferrari, que a día de hoy parecen inalcanzables en la General.