Pese a que los test de temporada no son representativos de lo que pueda pasar luego en la acción real, sí hay algo en lo que todos coinciden: Red Bull es muy fuerte. Los de Milton Keynes, que ya arrasaron en 2022, han realizado unas pruebas prácticamente perfectas y son realmente temibles. Tanto es así que ya se apunta a un doblete fácil en Baréin. Lo cierto es que sus propios rivales se muestran sorprendidos de lo que han conseguido con el RB19. Es el caso de Mercedes, que señala la poca altura del monoplaza austriaco como una de sus principales armas para ser tan rápido: "Son diez milímetros más bajos que todos los demás. Si pilotamos tan bajo, la parte inferior de la carrocería se rompería", ha señalado un portavoz de Mercedes en unas palabras concedidas al medio Auto Motor und Sport.
Red Bull ha hecho las cosas muy bien
Por su parte, Toto Wolff también ha querido recalcar otros aspectos en los que los hombres de Milton Keynes siguen estando por delante: "Frenan más tarde, aceleran mucho antes y ganan una cantidad increíble de tiempo con una menor tracción. Si nosotros nos acercamos al vértice de esta manera, ni siquiera llegamos al ápice", apunta el ingeniero austriaco.