La segunda sesión de entrenamientos se ha caracterizado por la ausencia de incidentes importantes en pista, alguna pasada de frenada, pero no hubo grandes sorpresas como sí hubo por la mañana. Eso sí, Yuki Tsunoda no había participado en la totalidad de esta práctica tras el accidente que había sufrido en los Libres 1 al haber impactado contra las barreras. A pesar de no haber rodado, los mecánicos hicieron un gran trabajo para reparar su AT02 antes del final y pudo completar una vuelta lanzada con los neumáticos Blandos. También hay que destacar que Kimi Räikkönen había recuperado el volante de su C41 al habérselo cedido a Robert Kubica como sucedió en ocasiones anteriores.
Durante los primeros 20 minutos, la mayoría de pilotos había rodado con las gomas Medias, mientras que Lando Norris, Carlos Sainz y Nicholas Latifi habían sido los únicos en montar el Duro. En esta primera tanda de rodaje, los Mercedes estuvieron en lo más alto de la tabla y poniendo de manifiesto que este circuito de Hungaroring lleva su nombre. La ventaja no era enorme sobre los Red Bull, ya que el RB16B de Verstappen se había situado a tan solo una décima. Como es habitual en estos entrenamientos, las posiciones eran más dispares por detrás de los dos equipos más poderosos de la parrilla. Los Alpine estuvieron a un gran nivel con las gomas amarillas y esto es una buena noticia de cara a lo que nos podríamos encontrar el domingo.
Los Mercedes empiezan a marcar el ritmo
Una vez los Medios y los Duros se guardaron en boxes, todos montaron la goma roja para completar la simulación de clasificación y ahí empezamos a presenciar tiempos más representativos. Bottas había sido el más rápido con un 1:17.0, su compañero fue el que estuvo más cerca, mientras que Verstappen sí estuvo un poco más lejos, tres décimas. El verdadero salto tuvo lugar entre el primero de los RB16B y Esteban Ocon cuya diferencia fue de medio segundo. Como es lógico pensar, estos tiempos solo son aproximaciones y no será la realidad a partir de mañana, especialmente, en la zona media. La ausencia de los Ferrari era una sorpresa y también ver a Pérez por detrás de uno de los Alpine. Los equipos tienen mucho bajo la manga y mañana será el día donde veamos su máximo potencial.
