Los test de pretemporada de Fórmula 1 dejaron unas sensaciones irregulares por parte del equipo Mercedes, y es que los de Brackley parecieron no encontrar una configuración óptima en su monoplaza durante los tres días de pruebas. Además, vimos a un Lewis Hamilton ciertamente incómodo a los mandos del W12. Esto generó controversia entre los aficionados y los medios de comunicación. Algunos creen que podrían perder su hegemonía, sin embargo, muchos coinciden en que hay que coger con pinzas lo visto en Baréin. Es el caso de Max Verstappen, quien no duda en que los germanos volverán a partir como favoritos y, por ende, serán el rival a batir en la parte alta de la parrilla. Para llevar a cabo esta afirmación, el de Hasselt se apoya en los datos analizados a los heptacampeones, que sin duda están escondiendo gran parte de su potencial, el cual mostrarán a partir de la próxima semana.
¿Habrá batalla por la corona?
"Los hombres de Mercedes son rápidos. Podemos ver lo que están haciendo en los datos, y dieron su primera vuelta con menos potencia. Después, completaron dos giros lentos seguidos de una segunda vuelta lanzada. En esa ganaron medio segundo en potencia. Supongo que nosotros y Mercedes estaremos cerca el uno del otro. Por detrás es difícil de predecir, no obstante, creo que McLaren es el tercer equipo. El viento cambió 180 grados desde el primer día y en esa curva siempre es algo molesto, así que no deberíamos prestarle demasiada atención a los tiempos. Quizás Mercedes estuvo un poco perdido con la configuración el primer día, pero en la última jornada parecían mucho más estables. También planificaron dos 'filming days' en Baréin antes del primer Gran Premio", ha señalado en unas palabras para el canal de televisión de Países bajos Ziggo Sports.
