El equipo Ferrari tuvo que hacer frente a algunas adversidades el año pasado después de verse superado una vez más por Mercedes y sufrir la presión de sus rivales ante las especulaciones de ilegalidad de su unidad de potencia. Su máximo responsable, Mattia Binotto, ha hablado al respecto y no ha dudado en admitir que uno de sus errores en la pasada campaña fue mostrarse demasiado débiles ante los medios, y es que, según su criterio, en un deporte donde el ámbito político también está presente, tendrían que haber jugado mejor sus cartas para no convertirse en la presa fácil y evitar así un exceso de presión, la cual forma parte de la estrategia del resto de escuderías para originar situaciones de tensión dentro de la estructura. Por otro lado, el ingeniero de Lausana asegura estar satisfecho con la evolución experimentada en 2019 y confía en seguir dando saltos cualitativos en próximas ediciones para situarse al nivel de su máximo adversario, la escudería de las flechas plateadas, y por tanto terminar por recuperar el terreno perdido, al igual que ya hicieran hace cinco años, cuando atravesaron una etapa critica.
Cambio de filosofía
"La Fórmula 1 no supone solo un desafío técnico y deportivo, sino también político, y eso probablemente explica una de nuestras debilidades durante el año pasado. Lo cierto es que no somos lo suficientemente buenos en las polémicas; hay personas que son mejores y emplean los medios de comunicación para generar presión. Por lo tanto, tenemos que comprender cómo podemos mejorar en ese aspecto y actuar mejor de cara al futuro, ya que esto forma parte del equilibrio de poder en una temporada. Bajo mi punto de vista, las acusaciones son polémica por el hecho de que nos señalan con el dedo. Como ya he dicho, se trata de generar presión. Hay que responder todas las preguntas en las entrevistas. En 2019 hubo una cierta tendencia a señalarnos, pero desde el principio sabemos que tenemos que vivir con eso. Como equipo nuevo, siempre tenemos que lidiar con situaciones nuevas. A pesar de ello, me siento muy satisfecho con nuestro progreso y soy consciente de que avanzar no es cosa de un año. Por ejemplo, en 2014, cuando llegaron los motores nuevos, nos encontrábamos a kilómetros de distancia de nuestros oponentes y transcurrió un tiempo hasta que al final pudimos luchar de tú a tú contra ellos", ha comentado el suizo en palabras concedidas al portal web alemán Motorsport-Total.
