De cara al fin de semana en tierras italianas, la escudería de Maranello afronta esta cita con una decoración nueva tanto en los monos de los pilotos como en el monoplaza. El icónico rojo sigue presente, pero ahora gana protagonismo el amarillo, cuya finalidad es celebrar el 75 aniversario de Ferrari. El propio Charles Leclerc afirma que todo lo que engloba este Gran Premio es asombroso, pero también hay muchos eventos que atender fuera de la pista.
Charles Leclerc:
"Esta cita es especialmente diferente porque por una vez no solo es rojo, sino también amarillo. Este es un color especial para este fin de semana con el fin de celebrar los 75 años de Ferrari. Como siempre, la semana de Monza es ajetreada para nosotros, pero siempre es una sensación increíble. Tuvimos algunos eventos ayer en Milán con mucha gente, mucho apoyo y es sencillamente genial. Todo esto hace que te sientas como en casa, es asombroso y ojalá tengamos un buen fin de semana".