La escudería Alfa Romeo ha dado paso adelante considerable en las últimas dos temporadas. Kimi Räikkönen ha sido una de las piezas clave del equipo en esta campaña y así lo estuvo demostrando en las primeras citas del calendario. El veterano finlandés fue capaz de entrar en Q3 y terminar en la zona de puntos en Melbourne y en Sakhir, logrando muy buenos resultados por lo que ahora están en cuarta posición en el campeonato de constructores. A pesar de estas posiciones, la marca italiana aún tiene que mejorar más para estar a la altura de los otros equipos de la zona media. Kimi destaca el buen trabajo que ha estado haciendo todo el equipo desde que llegó a finales de 2018, así que se muestra satisfecho con el rendimiento actual del C38.
Increíble paso adelante de Alfa Romeo en 2019
"No tengo ningún objetivo. Obviamente, no puedo hablar mucho del coche del año pasado porque hice unos test pero en un circuito que es complicado decir si es mejor que el monoplaza actual. Estoy seguro que el equipo hizo un buen trabajo con el coche que piloté en Abu Dabi en unos test de neumáticos. Aún hay muchas cosas por mejorar, parece una historia de nunca acabar pero estamos intentando progresar. En general, tenemos un paquete aerodinámico bastante bueno y sólido, lo entendemos muy bien, por lo que los chicos lo están haciendo bien en todas las áreas. La base es mejorar todo el tiempo lo más rápido posible, por lo que veremos qué nos encontramos a final de año".
No creía que llegara a ser piloto de F1 algún día
"Mis primeros recuerdos eran cuando Keke [Rosberg] competía. Obviamente, siempre apoyaba a los pilotos finlandeses, pero no pensaba en convertirme en un piloto de F1. Quizá lo sueñas cuando eras un niño pero, cuando empecé en los karts, nunca creería que sucediera alguna vez porque necesitabas un gran cantidad de dinero. Quizá lo creí un poco más cuando conseguí un manager que me ayudaron. Imagino que era un sueño no muy realista en ese momento, pero fue rápido cuando comencé allí".
