Sergio Pérez no tuvo su mejor día este pasado domingo. Tras realizar una sobresaliente sesión de Clasificación en la que se hizo con la primera fila de la parrilla y además logró superar a su compañero de garaje, las tornas cambiaron durante la carrera, ya que sufrió para poner a punto sus neumáticos, lo que le hizo perder terreno respecto a los líderes de manera progresiva. Pero lo peor vino después del relanzamiento de la prueba, pues cometió un error que le llevó fuera del Top 10. Finalmente, no sería capaz de acabar en los puntos al quedarse atrapado detrás de los Alpine, que contaban con DRS, haciendo con ello más complicado el adelantamiento en una pista en la que rebasar monoplazas es una tarea arduo complicada. El asesor de Red Bull, Helmut Marko, ha lanzado el primer aviso al mexicano y ha remarcado sus puntos débiles de este domingo, por lo que deberá hacer borrón y cuenta nueva en Portugal para quitarse el mal sabor de boca y evadir las advertencias del austriaco, cuya paciencia no está entre sus virtudes, como bien saben Pierre Gasly y Alexander Albon, entre otros.
No más carreras fuera de los puntos
"El undécimo lugar es, por supuesto, más que molesto. Comenzó bien en la clasificación y, repente, de la nada, marca el segundo mejor tiempo. Entonces pensamos que todo marchaba bien. Creo que en carrera no consiguió poner los neumáticos en temperatura tan rápido como lo hizo Max. Además, después de la reanudación de la carrera, por desgracia, todo salió mal, pese a que le pusimos el neumático blando. No obstante, con el trompo se acabó. Y luego estuvo también el tema de la sanción de diez segundos", ha señalado en unas palabras concedidas al canal de televisión austriaco ServusTV.