Los test de pretemporada de Fórmula 1 han generado un sinfín de duras, como suele ocurrir cada año. Lo único más o menos seguro es el gran rendimiento de Red Bull, mientras que algunos de sus rivales, como Ferrari, han dejado muchos interrogantes. El SF-23 parece un coche rápido a una vuelta, pero degrada en demasía en las tandas largas, lo cual puede ser un gran problema de cara a las carreras, como ya vimos en 2022, cuando no eran capaces de hacer valer sus pole positions. El jefe de la escudería italiana, Frédéric Vasseur, llama a la calma y hace hincapié en la poca representatividad de los test. Hasta que no llegue este viernes y arranquen los primeros libres, no comenzaremos a ver el verdadero potencial de los equipos.
Ahora comienza la lucha real
"Hay que tener en cuenta que la carrera será una historia diferente a lo que hicimos el fin de semana pasado. Cuando Charles hizo la vuelta rápida, la temperatura de la pista era de 55 grados. La carrera es a las seis o a las siete, y también la clasificación, de modo que será una historia completamente diferente. Tenemos que tomar los test como unos test y no como los Libres 1 de Baréin. Creo que hemos llevado a cabo un buen trabajo escaneando los elementos más importantes del coche, nos hemos centrado en las tandas largas y hemos logrado buenas mejoras", ha comentado en palabras publicadas por el medio RacingNews365.com.