La relación entre Red Bull y Renault llegó a su fin la temporada pasada tras una última etapa donde el binomio no funcionó de la manera esperada, ya que los de Milton Keynes se convirtieron en uno de los equipos menos fiables de la parrilla y, en consecuencia, el motor Renault. Recientemente, Adrian Newey reconoció que desde Red Bull habían criticado a los franceses con el único objetivo de presionarles. Unas palabras a las que no ha tardado en reaccionar el máximo responsable de la escudería de Enstone, Cyril Abiteboul, quien ha aseverado que una gran parte del éxito cosechado por los austriacos en su época dorada se debió al trabajo de Renault. Tanto es así que no ha dudado en afirmar que los de Milton Keynes son los que son en la actualidad gracias a ellos, por lo que no comprende las críticas, sea cual sea el fin de las mismas.
"Debemos reconocer los méritos de Christian Horner y Red Bull en una cosa: su estrategia de comunicación es fantástica. La comunicación es parte de este mundo y es parte de la Fórmula 1, de tu estrategia y de tus tácticas. No es el primer equipo, ni será el último, en usar armas para influir. Estoy de acuerdo con Christian en que nuestro motor no estaba al nivel necesario en los años 2014 y 2015. Renault ha sido responsable de hacer a Red Bull lo que es a día de hoy y de hacerles ganar cuatro Campeonatos seguidos. Desde una perspectiva financiera con patrocinadores, desde una perspectiva tecnológica con talento y con fichajes, Red Bull es lo que es hoy gracias a Renault", comentaba el pasado viernes durante la rueda de prensa celebrada en el circuito de Bakú.Vivieron complicados momentos juntos
Por otro lado, el jefe de Red Bull, Christian Horner, secunda las palabras de Newey y explica que ellos vivieron una etapa complicada debido al mediocre rendimiento del motor Renault, sobre todo en el año 2015, donde finalizaron la campaña en la cuarta posición del Campeonato de Constructores. Algo muy negativo teniendo en cuenta que habían logrado cuatro títulos consecutivos y que en 2014 venían de convertirse en los segundos mejores de la parrilla tras los Mercedes, que a partir de entonces comenzaron su hegemonía: "Hemos tenido varias conversaciones; hemos estado en París, hemos visto a Carlos Ghosn y le presentamos nuestras preocupaciones. En el año 2015, cuando el motor era peor que en 2014, la frustración era tal que pensamos que si nos abríamos sobre nuestras frustraciones, quizás eso causaría una reacción. Intentas cualquier cosa para crear competitividad. En ese momento quizás Renault se podía permitir la vergüenza de que esos motores no fueran competitivos, ni fiables, ni rindieran. Por desgracia, no funcionó", ha expresado el jefe de Red Bull.