No ha podido ser. Ferrari presentó una apelación a la FIA por la sanción a Carlos Sainz en el Gran Premio de Australia, mediante la cual el español perdió el cuarto puesto y quedó fuera de los puntos, sin embargo, el "Alto Mando" de la competición decidió desestimarla, dejando en saco roto la protesta de la escudería italiana. Algo que ha dolido al piloto madrileño, quien lamenta la determinación de la Federación Internacional del Automovilismo. No hay que olvidar que el número '55' golpeó a Fernando Alonso en la última relanzada de la cita australiana, haciéndole trompear y golpear el muro. La acción acabó con cinco segundos de penalización que le hicieron caer fuera del Top 10. A pesar de todo ello, Sainz asegura estar cien por cien concentrado ya en la próxima prueba del campeonato, que tendrá lugar en Azerbaiyán.
Toca hacer borrón y cuenta nueva
"Muy decepcionado de que la FIA no nos haya concedido el derecho de revisión. Dos semanas después, sigo pensando que la sanción es demasiado desproporcionada y creo que al menos debería haberse revisado en base a las pruebas y razonamientos que hemos presentado. Tenemos que seguir trabajando juntos para mejorar ciertas cosas de cara al futuro. La consistencia y el proceso de toma de decisiones han sido un tema controvertido durante demasiadas temporadas y tenemos que ser más claros por el bien de nuestro deporte. El caso de Australia ya forma parte del pasado y estoy 100% centrado en la siguiente carrera en Bakú", ha compartido a través de sus redes sociales.