Durante la temporada 2019 de Fórmula 1 vimos un importante salto cualitativo de algunos pilotos, entre ellos el de Max Verstappen. El neerlandés dejó atrás su irregularidad y demostró haber adquirido una mayor madurez, lo que le permitió alcanzar el escalón más alto del podio hasta en tres ocasiones, así como batir a los dos hombres de Ferrari, que en los test de pretemporada parecían muy superiores. Sin embargo, el número '33' de Red Bull dejó patente que aún le puede la impulsividad, y es precisamente lo que el exjefe de Renault, Flavio Briatore, cree que debe trabajar de cara a un futuro inminente, sobre todo después de las acusaciones que lanzó contra Ferrari, que tras su espectacular regreso de vacaciones levantó sospechas con su unidad de potencia.
"Max es un piloto muy rápido que sabe cómo mejorar constantemente y a menudo adquiere el protagonismo sobre la pista, pero también debe aprender a mantener la boca cerrada. Podría haber dejado fuera la acusación de que el equipo Ferrari hizo trampa. En primer lugar, no le corresponde a él hacer ese tipo de declaraciones, y en segundo lugar, la historia era totalmente inexacta", ha expresado en palabras para el medio GPFans.
Una decisión acertada
Por otro lado, y al contrario de lo que ha sucedido con muchos otros que han optado por opinar al respecto, el de Verzuolo apoya la renovación de Max con Red Bull hasta 2023, ya que, si bien no tiene asegurado que el monoplaza vaya a ser capaz de pelear de tú a tú con los dos grandes favoritos, el de Milton Keynes es un equipo sólido que, con gran probabilidad, le brindará un coche competitivo que le permita pelear en la zona alta de la parrilla, lo que unido al talento del de Hasselt podría ser suficiente para adentrarse en la pelea por la corona. Del mismo modo, asegura que en su equipo perfecto el neerlandés formaría pareja con Leclerc, pues sería una apuesta segura de cara al futuro.
"Red Bull siempre va por el buen camino, y ahora que Honda es también una fuerza permanente en la escudería, la incertidumbre que rodea a la potencia y la fiabilidad del motor está disminuyendo con el paso del tiempo. Es agradable ver a Max en el equipo austriaco, ya que está situado en la parte alta de la tabla y creo que así seguirá siendo durante mucho tiempo. Personalmente, si pudiera juntar a dos pilotos en un mismo equipo, definitivamente me gustaría tener a Leclerc y Verstappen trabajando mano a mano. Son dos fenómenos con los que podrías ganar todos los Grandes Premios y Campeonatos del mundo en los próximos diez años", ha expresado a modo de conclusión.
