Retirado Niki Lauda, Alain Prost escogió prácticamente a su compañero de equipo, llegando el ya veterano Keke Rosberg a las filas de McLaren. Senna hacía algo parecido "echando" a De Angelis de Lotus y vetando la entrada del peligroso Derek Warwick en favor de la llegada del poco competitivo Johnny Dumfires. Williams empezaba a mostrarse como una firme candidata al título gracias a los cada vez mas potentes Honda turbo V6. 1986 fue por cierto la temporada de la "institucionalización de los turbo, pues todas las escuderias fueron obligadas a llevar este tipo de propulsor.
Para suplir a Keke al lado de Nigel Mansell, Frank Williams, ahora en silla de ruedas después de un accidente de tráfico en Marzo, se hizo con los servicios de un otro viejo campeón, Nelson Piquet, que rompía con Brabham tras 8 temporadas. Su puesto al mismo tiempo era suplido por Elio de Angelis, que encontraría trágicamente la muerte en unos entrenamientos privados en Paul Ricard. La potencia de los propulsores, rondante a los 1000-1100 CV, empezaba a hacerse difícil de controlar.
Por otro lado el equipo Toleman, fue comprado por la empresa Benetton, contando con el austríaco Gerhard Berger y el italiano Teo Fabi como pilotos.
Frente a mas de 100.000 personas en Brasil, Ayrton Senna con su Lotus John Player negro y Nelson Piquet con su Williams tricolor, levantaron pasiones contrapuestas entre la "torcida". Mansell, unico capaz en la practica de inquietar aquel dia a Nelson, se salió en la primera vuelta, dejando via libre para que el piloto de Rio ganara con gran superioridad.
La F-1 volvía a España gracias al nuevo trazado de Jerez. El trazado fue en su momento elogiado por la mayoría de los pilotos que considreban que en alquel momento era el mejor circuito de Europa de cara al espectador. Lástima que la asistencia de publico no fuera de las mejores... Y eso que la carrera no pudo tener un final mas emocionante: Senna ganaba por tan solo 0,014 segundos de ventaja sobre Nigel Mansell. Prost, que había empezado bastante flojo el cameonato, despertaba con dos triunfos en San Marino, llegando con las últimas gotas de combustible, y en Mónaco, por delante de Rosberg, bastante inedito a lo largo de su último año de F-1. Después de esta, su tercera victoria consecutiva en el principado, la táctica de Alain estaba clara: Allí donde no pudiera vencer a los potentes Williams, sumaría segundas y terceras posiciones decisivas para el campeonato, ganándose entonces aquel año el sobrenombre de "el profesor".
Mansell se vengaba de Senna batiéndole en Bélgica y Canadá al tiempo que Ayrton, respondía en el trazado urbano de Detroit. Mansell, con dos fáciles victorias mas en Francia y Gran Bretaña, se puso al mando del mundial. En Brands Hacht por cierto, el accidente que obligó a repetir la salida, puso punto final, con las piernas rotas, a la carrera de Jaques Laffite.
Piquet pasó al contraataque con dos triunfos en Alemania y Hungría, el segundo de ellos en dura lucha con Senna, al que alcanzó y rebasó en dos veces, la segunda con una derrapada continua en la frenada que dejó al neofito público hungaro alucinado. Prost, que hubo de empujar su pesado McLaren los últimos 200 metros de Hockenheim (para coger 1 punto, que luego en los descartes no le serviría) aprovechó las averias de los rivales en Austria para obtener nueve puntos de oro, esta vez por delante de los Ferrari de Alboreto y Johansson, que pasaron una temporada bastante desastrosa con un coche inconducible. La parrilla de salida por eso, la había encabezado los dos miembros de Benetton-BMW, Fabi y Berger, autor el primero de ellos, de una pole con una velocidad maxima alcanzada de 356 kmh. La verdad es que Zelweg era un pedazo de circuito.
Piquet lideró el doblete de Williams en Italia, aunque el triunfo posterior de Mansell en Portugal, dejó al británico a un paso del título.Estoril resultó ser un negocio para las aspiraciones de Nigel que se deshizo de Senna, autor de la pole, y su peligro "interno" Piquet sufrió un trompo que le costó el segundo puesto. En Mexico, Prost salvó su primer "Mach point"; o mejor dicho, Mansell y Piquet lo perdieron a base de luchar entre ellos. Berger se dió a si mismo y a Benetton la primera victoria de su corta historia, siendo el único que no paró a cambiar las gomas. El circuito de México, al que no visitaba la F-1 desde 1970, estaba sin referencias para los técnicos de Goodyear y Pirelli, acertando los técnicos de la marca italiana en la mezcla y dureza de los mismos.
En Australia, prueba que cerraba el campeonato, se vivió una jornada de lucha dramatizada de nuevo por los neumáticos y el combustible. Mansell era virtualmente favorito en las apuestas. Piquet necesitaba ganar y Prost necesitaba además de la victoria, tener a Nigel fuera de los puntos. Mientras Rosberg prometía ayuda a Prost si se daba la situación en la carrera, Piquet y Mansell se enzarzaban en la batalla por la pole decidida a favor del británico. Sin embargo Rosberg y Piquet fueron los que alternaron el liderato de la prueba durante las primeras 64 vueltas. Entonces Keke abandonó a causa de un pinchazo, que quizas hubiera podido aguantar hasta boxes. Keke pensó que había roto su propulsor deteniendo de inmediato su coche. De esta forma tan absurda concluyó su carrera deportiva en la F-1. Goodyear había aconsejado antes de la carrea un cambio de gomas por precaución. Prost efectuó esta parada con suficiente antelación para evitar problemas y Nigel, tal vez la retrasó demasiado.
Cuando rodaba comodamente en una tercera posición que le garantizaba el título, la rueda trasera izquierda del Williams sufrió un espectacular reventón el la recta principal a 300Kmh. Nigel, controló el coche con su habitual habilidad y evitó un duro accidente. Prost se lanzaba a la zaga de Piquet, que prevenido de lo de su compañero, no tardó en entrar a boxes a realizar la sustitución, pero ya no tuvo tiempo de recuperar la distancia perdida. en las últimas vueltas. A Alain no le costó mucho administar la ventaja en las últimas vueltas, haciendo caso omiso de un ordenador erroneo que le advertía que se iba a quedar sin gasolina. Entró con 5 segundos de ventaja sobre Piquet para bajarse inmediatamente de su Mc y levantar los brazos como primer bicampeón consecutivo desde los tiempos de Jack Brabham. A Nigel Mansell la mala suerte le empezaría desde entonces a perseguir de un modo bastante desagradable. Williams pudo contentarse al menos con el título de constructores, bastante por delante de los de Woking.