Buffy Anne Summers, hija de Hank y Joyce Summers, debe enfrentarse a temprana edad con una terrible revelación: ella es la Cazavampiros, la elegida en su generación para enfrentarse a las fuerzas del mal. Por otra parte, los cambios que esto produce en su vida se multiplican cuando sus padres se divorcian, y como consecuencia se ve forzada a dejar toda su vida pasada atrás. Buffy ha tenido que dejar su escuela anterior tras haber sido expulsada por incendiar el gimnasio: unos vampiros atacaron el establecimiento y no tuvo otra opción que matarlos a todos quemándolos. Se muda entonces de Los Ángeles a la ciudad de Sunnydale, en California, donde su madre encuentra trabajo en una galería de arte. Ahí llega la heroína, dispuesta a olvidar su pasado, sus problemas en su antigua escuela, y sobre todo, su deber. Con ese anhelo de ser "una persona normal", Buffy se encontrará con que su llegada a Sunnydale no fue un accidente, pues allí la espera su nuevo Vigilante, Rupert Giles, quien ocupando el puesto de bibliotecario de su nueva escuela, está dispuesto a guiar a Buffy en su interminable lucha. Muy a su pesar, Buffy se ve obligada a asumir su posición cuando la vida de sus nuevos amigos se encuentra amenazada. Comienza a desarrollar sus habilidades, mientras por otra parte desarrolla grandes amistades y una pequeña pero aceptable vida social: un arma infalible con la que ninguna Cazadora había contado jamás, arma que finalmente le permitirá asumir su destino.