Gran Premio de España. Cerca de Schumi y del equipo
Han sido varios y de distinta naturaleza los motivos que han traído a Luca di Montezemolo hasta el circuito de Montmeló, sede del quinto Gran Premio del Campeonato del Mundo de Fórmula 1. Después de haber seguido las dos sesiones de entrenamientos libres desde el garaje y de haber saludado a los numerosos ferraristas presentes en las gradas, el presidente de Ferrari ha querido compartir, durante un breve encuentro con los medios de comunicación presentes en el paddock español, las razones que le han llevado a unirse al equipo en el trazado catalán. Entre esas motivaciones, la primera ha sido de naturaleza sentimental, ligada a Michael Schumacher y a aquella primera victoria conquistada en 1996 bajo la lluvia, la primera de una larga serie. Mis pensamientos están con él y con su familia en estos momentos difíciles, espero que pueda ganar la batalla en la que se encuentra luchando desde hace meses. Luego, la atención giró sobre Marco Mattiacci (sentado a su lado), quien recibió una llamada a primera hora de la mañana para ser nombrado nuevo Director de la Scuderia tras la dimisión de Stefano Domenicali, hombre de gran lealtad que desafortunadamente no tuvo la satisfacción que otorgan los resultados, a causa de la dura ley del deporte, exactamente igual que cuando un futbolista tira al palo en vez de marcar gol.
Mattiacci cuenta ya con una larga carrera en Ferrari, aunque sea fuera del mundo de las carreras. Lo escogí porque me interesaba tener a una persona que supiese cómo gestionar un grupo, poner a la gente adecuada a trabajar en los puestos adecuados en las mejores condiciones, con experiencia y una completa capacidad de gestión. Como ya sucediera con Jean Todt en 1992, Montezemolo quiere permanecer cerca de Mattiacci en sus primeros meses de mandato. Cuando llegó, Todt recibió muchas críticas por no saber nada de Fórmula 1, pero luego supo hacer un gran trabajo. Es como retroceder en el tiempo, estoy seguro de que Mattiacci hará un buen trabajo, pero debe quedar claro que esto no es un One man show, se trata más bien de inyectar en nuestro equipo determinación, rapidez a la hora de tomar las decisiones y claridad organizativa.Si no se ha trabajado bien, entonces hay que entender las razones y reaccionar, porque aún quedan muchas carreras y estoy convencido de que podemos mejorar, porque veo a un equipo capaz de responder, añadió Montezemolo, descartando con sus declaraciones la idea de una supuesta temporada de transición. En un último análisis, Montezemolo afirmó no estar contento con los resultados, por debajo de sus expectativas y de las de los aficionados ferraristas, pero quiso dejar claro que de ahora en adelante ya no habrá más excusas. El de ahora es el último monoplaza nacido sin una programación precisa de nuestro túnel de viento. Nació en el de Toyota porque el nuestro no estaba listo, pero a partir de ahora no habrá excusas, porque finalmente contamos con un túnel eficiente.
Somos Ferrari, estamos en Fórmula 1 desde 1950 y debemos volver a ganar.