Ferrari, Red Bull y McLaren, en un puño¿Está Ferrari mejor que el año pasado? Esa es la gran pregunta que ronda la cabeza de buena parte de los aficionados a la Fórmula 1 y los 'tifosi' en particular. En el propio 'paddock' nadie lo tiene claro. Cierto es que el secretismo que ha rodeado a la escudería italiana en sus apariciones públicas no ha ayudado. Fernando Alonso solo salió a mostrar sus sensaciones a la prensa el primer día, el martes, nada más realizar sus primeros kilómetros a los mandos del F138, y de Felipe Massa tampoco han salido grandes titulares. «Hemos realizado el plan previsto», «Vamos en una buena línea de trabajo», o «Aún nos queda trabajo por delante», son las frases más repetidas en todas las pretemporadas de Fórmula 1, y esta no ha sido una excepción. Ni en Ferrari, ni en ninguna escudería.
También en otro aspecto están los pilotos y los técnicos de acuerdo: las Pirelli de 2013 van a poner mucho picante a esta temporada. La fábrica italiana de neumáticos ha decidido que, visto que los cambios técnicos para este año son prácticamente nulos, ellos se convertirán en el factor determinante. Antes de que Sergio Pérez soltase eso de que no sería raro ver en algunas carreras «hasta siete paradas» para cambiar gomas, muchos habían incidido en que la degradación de los neumáticos este año estaba asombrando a todos. Fernando Alonso fue uno de ellos, al igual que Sebastian Vettel o el propio Jenson Button. A priori, los tres cabeza de serie de los tres equipos favoritos para esta temporada.
Quien se ha quedado un poco más atrás, al menos sobre el papel, es Mercedes. La escudería alemana quiere revertir unas decepcionantes temporadas que culminaron con la segunda salida de Michael Schumacher de la Fórmula 1, poniendo en manos de Lewis Hamilton sus opciones de título. Y no pinta nada bien. Los problemas de fiabilidad que han mostrado el piloto inglés y Nico Rosberg, tanto en Jerez como, en menor medida, en Montmeló, han caído como un jarro de agua fría sobre los que tenían esperanzas acerca de lo que pueda hacer una de las parejas más prometedoras del 'paddock'.
El último día de pruebas en la primera semana de Montmeló permitió a todos los pilotos probar en condiciones de mojado, y el propio Hamilton se llevó el mejor tiempo. Sin embargo, él mismo se ha autodescartado. No está contento con el W04, del que elogia su buen motor. «El coche está un segundo, a veces dos segundos por detrás del año pasado. Los grandes equipos ganarán otro segundo, así que nosotros no vamos a mejorar tres segundos. Es un hecho. Esperamos haber mejorado tres segundos al final del año. Es hacia donde vamos, pero definitivamente no al principio», se resignaba el británico. Pese a los elogios que le dedicaron los dos principales 'gallitos' de la temporada 2012, Hamilton no se ve a su altura: «No es que sea imposible, pero Vettel o Alonso decían que podemos luchar por el campeonato y de momento no creo que eso vaya a pasar».
Red Bull y Ferrari... con permiso de McLaren
Con los neumáticos más complicados de entender que nunca, los equipos han intentado, no siempre con éxito, probar sus soluciones aerodinámicas en Montmeló. Las sensaciones son similares a las de Jerez: en seco, y tanto en tandas largas como cortas, el Red Bull RB9 sigue entre los mejores. Algo que, por otro lado, no sorprende a nadie. Sebastian Vettel y Mark Webber se han mostrado confiados de cara a las posibilidades de su monoplaza, si bien han querido rebajar la euforia tal y como han ido sus rivales.
Y es que, mientras en Red Bull prefieren ser cautos, en Ferrari no pueden evitar esbozar una ligera sonrisa de alivio. El F138 no ha nacido defectuoso, como sí pasó con el F2012, y en Milton Keynes aún tienen muy presente lo que Fernando Alonso hizo sudar a Sebastian Vettel el año pasado. Hasta la última vuelta de la última carrera, Alonso, con un coche que arrancó en Australia a más de dos segundos, tuvo opciones al título. ¿Qué hará el español con un monoplaza capaz de pelear de tú a tú con el alemán? A esta preocupación lógica se unen algunos problemas de fiabilidad que ha sufrido, especialmente Mark Webber. El australiano, de hecho, tuvo varias averías este viernes, marcado por el mal tiempo, y que acabó con cinco banderas rojas, una de ellas de Felipe Massa.
Las diferencias entre Red Bull y Ferrari no son demasiado significativas. El caso de McLaren es una incógnita. Jenson Button se llevó todos los elogios en Jerez, pero en Montmeló tanto él como Sergio Pérez han pasado algo más de puntillas. Son muchos los recelos que sobrevuelan el 'paddock', y que no se fían de esa supuesta posición de retaguardia que han adoptado los de Woking. Entre ellos se pueden colar otros, como Lotus -del que Raikkönen no se ha mostrado muy satisfecho- o incluso Williams, que es el monoplaza que menos ha rodado -en Jerez llevaron el FW34 de 2012-, pero uno de los que ha montado unas soluciones aerodinámicas más innovadoras.
Queda solo una tanda de entrenamientos en Montmeló. El circuito barcelonés cerrará la próxima semana la pretemporada 2013, y Australia ya se engalana para recibir al 'gran circo'. ¿Se verá a Button imparable como en 2012... para que luego sea un espejismo? ¿Será Vettel el que arranque al frente? ¿Podrá Alonso dar la primera estocada? Aún quedan detalles por pulir y Montmeló no descansa.
Saludos!