La revolución en la Fórmula UnoEl director técnico de Toro Rosso (antiguo director técnico de Sauber), James Key, explicó para La A?ción los cambios técnicos del reglamento 2014 que buscan innovar a la máxima categoría
CIUDAD DE MÉXICO (Martes 23 de abril).- Desde principios del año se ha dicho que la temporada 2013 de la Fórmula Uno ofrecería pocas innovaciones tecnológicas en los monoplazas, en especial, porque la mayoría estaría enfocado en los desarrollos para el 2014, sin embargo, los encargados del progreso técnico en las diversas escuderías no piensan de esa forma, de hecho, gente como el ingeniero británico James Key del equipo Toro Rosso, viven uno de sus años más importantes, y es que en sus manos está la gestación de dos proyectos: el de la presente campaña y el del año siguiente.
?El 2013 es una verdadera temporada de F1, con puntos reales y carreras. Todos los equipos se enfrentan al dilema de lo mucho que es trabajar en 2013 y cuánto trabajar en el proyecto de 2014.
Como todos los demás, nosotros estamos ocupados con los dos, lo que se traduce en un cuestionamiento difícil para nuestros recursos?, expresó en entrevista el director técnico de la segunda casa de Red Bull en el Gran Circo.
Para los equipos de presupuesto moderado como Caterham o Marussia existe poco margen de maniobra, y trabajan con menores recursos en el chasis de la siguiente campaña.
Para escuderías de media tabla (Toro Rosso, Sauber, Force India o Williams) su planta laboral se ha centrado en el desarrollo de dos proyectos al mismo tiempo, pero con un enfoque en el 2013 donde lo importante es ir creando cosas en cada carrera que sirvan para el 2014, así como no perder el ritmo respecto a los rivales.
?Al llegar al límite de la normativa vigente, que ha sido más o menos la misma por varias campañas, hay menos margen para encontrar algo nuevo en el presente año, por lo tanto no se verá un cambio importante en términos aerodinámicos en la presente campaña. Las grandes evoluciones llegarán en el 2014?, expresó.
Es por eso que a diferencias de campañas anteriores, los paquetes de transformación aerodinámica y nuevos componentes serán únicamente los necesarios para no perder competitividad. No de forma tan continua salvo en las grandes escuderías como Ferrari, McLaren o Red Bull, donde el dinero permite dos equipos de trabajo, uno centrado especí?camente en el desarrollo de este año y otro concentrado en el futuro.
La máxima categoría vivirá la revolución más importante en la próxima temporada. Con el objetivo de crear una serie más competitiva, tanto en la pista como en los costos, así como más ecológica, los motores V8 (ocho cilindros) serán sustituidos por V6 de 1600 cc Turbocargados, que aunque en una primera instancia signi?caría una reducción de velocidad, ésta será compensada con un nuevo sistema denominado ERS (Sistema de Recuperación de Energía), que se encargará de obtener energía cinética como actualmente sucede con el KERS, pero ahora también aprovechará el calor generado para conseguir más y ayudar a la planta de poder a resarcir la potencia perdida.
Es en este punto, en obtener una potencia similar, con una planta de poder de menores prestaciones, el máximo desafío que en opinión de James Key afrontan las escuderías.
?Es un motor completamente diferente, con un regreso a los cargadores turbo, pero en una época muy diferente a la última vez que los vimos en acción. Su integración con el coche y adaptar el paquete aerodinámico de la nueva normativa será de los más grandes desafíos enfrentados en los últimos años?.
Y es que para los ingenieros no solo existe la demanda de sus propias escuderías, sino también la de los fanáticos, quienes desean ver autos igual de veloces, competencias aguerridas como las acontecidas en las últimas campañas.
EL HOMBRE CLAVE
James Key es popular dentro del paddock de la Fórmula Uno, pero para los no conocedores su ?gura se resume en ser el creador del Sauber C31, el coche con el que el piloto mexicano Sergio Pérez consiguió tres podios en la campaña 2012.
Sin embargo, este ingeniero, ahora miembro de Toro Rosso, no se ve como un factor clave en el éxito: ?La gente no debe creer siempre lo que se lee en los medios. Una sola persona no puede ser el principal factor. Yo no lo fui. Como director técnico mi papel es el de asegurar que todos tengan lo que necesitan para hacer su trabajo?.
Los hechos son indudables. Desde su llegada al equipo italiano con sede en Faenza existen mejores resultados. Después de cuatro grandes premios disputados se encuentran séptimos en el campeonato de constructores, una posición por debajo del objetivo para ?nal de campaña. ?Acabar sexto es algo ambicioso, y como siempre en la Fórmula Uno, el rendimiento es relativo a lo que hace la oposición.
Después de las primeras carreras sentimos que hemos conseguido progresos y seremos capaces de luchar por los puntos de forma regular el resto del año?.
De hecho, sus dos pilotos (Daniel Ricciardo y Jean-Eric Vergne) ya tienen puntos en la presente campaña. El australiano es decimotercero del clasi?cador general y el francés 15. La mano de Key comienza a verse, pero no solo en el coche, sino en los procesos de trabajo.
?Hemos fortalecido los aspectos del rendimiento del equipo. Para tener éxito es necesario ser bueno en todas las áreas. Cambiamos la forma en que el departamento de diseño y aerodinámica trabajan, asimismo ya podemos realizar las partes necesarias para el coche en casa, eso se traduce en un mejor control de calidad?.
Tal vez él mismo no se considera el hombre clave, pero lo cierto es que el Sauber C32, que maneja actualmente el mexicano Esteban Gutiérrez, no luce tan competitivo como el del año anterior, ni cercano al rendimiento del actual Toro Rosso donde James Key ya inter?rió.
Saludos!