By Luis Manuel López
Paciencia y fortalezaMi visión sobre Esteban...
La mayoría de las personas me dicen: ¿no ves a Esteban mucho mejor que Checo? Y no, yo prefiero irme con calma antes de volar a los pronósticos. Recordemos que ésta no va a ser una temporada cualquiera para los pilotos mexicanos.
Será la primera vez con dos mexicanos compitiendo todo el año, de modo que las luces, los reflectores, demasiada atención, estarán puestas sobre sus hombros.
Y por eso el más novato de ellos merece la gracia de la paciencia.
Madurez
Aquí me gusta insistir en que pese a las cualidades innegables de ambos y pese a haber cursado por categorías de desarrollo muy similares, tanto Checo como Esteban tienen cualidades radicalmente opuestas. Cada uno llega por su propio camino, su propia formación y sus propios medios, pero eso no hace a uno mejor que el otro.
En el caso de Gutiérrez, desde sus primeras incursiones en los monoplazas de los Estados Unidos, dejaba ver que se trata de un muchacho con apego a la disciplina, muy centrado, capaz de ordenar sus ideas y de expresarlas sin titubeos. Siempre establecido en un esquema que le brinda rumbo.
Respeta, primero que nada, una forma de trabajo y aunque se enfrente a jornadas complicadas suele mantenerse en una sola línea. Para Gutiérrez el método es tan importante como el resultado.
Transiciones
¿Qué pasa cuando un piloto cambia de auto? Vienen una serie de operaciones físicas y mentales complicadas de ejecutar.
¿Qué pasa cuando un piloto cambia de categoría? Pues interviene lo anterior, y además el factor del medio ambiente, algo más complicado.
A pesar de que el regiomontano ha demostrado que aprende muy rápido, los cambios de categoría parecen causarle un cierto grado de alteración. Así ocurrió cuando llegó a GP2, probablemente también cuando pasó a la GP3 y también de la Fórmula BMW a la F3 Euroseries.
En el momento actual su adaptación al nuevo coche, tras los ensayos de pretemporada, ha sido sensacional, pues rápidamente Esteban se deja ver cómodo y competitivo producto del gran kilometraje que Sauber le dio.
La escudería suiza sabe lidiar con novatos y le han puesto al mexicano más de dos mil kilómetros de rodaje entre Jerez y Barcelona, donde hizo de todo, con énfasis en entendimiento de los neumáticos, simulacros de carrera y sus procedimientos (claves, cambios de valores, pit-radio, etcétera) y sobre todo en las paradas en pits.
Eso es lo que me parece la primera etapa de la transición, ahora tendrá que venir la parte menos adivinable... el terreno de lo abstracto.
La pecera del GP
Esteban viene de GP2, una pecera donde los habitantes obtienen su lugar gracias al respeto que se gana con acciones rápidas y contundentes. Las batallas de GP2 son francas y abiertas no cuentan demasiado los daños y el recuento, mientras se cumpla el objetivo de los puntos.
Así se mueven esos peces
En F1, la pecera es muy distinta. Todo cuenta, mostrarse y ocultarse. Los movimientos nunca serán totalmente francos y abiertos, porque se corre demasiado riesgo al ser predecible; los contactos tienen un doble significado, pues además de lo físico y lo económico, la parte que más lastima es el prestigio, que invariablemente mete al infractor en una lucha interna (preguntar a Grosjean y Maldonado).
Los grandes peces de la F1 tienen la norma de conducirse de una manera con la que nadie sepa exactamente qué va a pasar? piensas una cosa, dices otra y haces algo parecido a lo primero. No es igual arrancar al lado de Jean Eric Vergne, que junto a Fernando Alonso; hay mucha diferencia de correr rueda a rueda junto a Charles Pic, que al lado de Kimi Raikkonen.
Esteban va a entrar a la pecera grande, donde se exige y se pierde el respeto muy fácilmente. Desde mi punto de vista, lo único que necesita es aprender a tomarlo y tiene experiencia para hacerlo, pero no es una operación de un solo día.
Sorpresivo
No tengo duda del talento que le ganó el premio Pirelli el año pasado en GP2, pero las estrategias de bajo consumo de hule están ya muy vistas. Esteban tiene esa cualidad, que seguro podrá utilizar en algún momento, pero además tiene otra gran fortaleza.
Mentalmente es demoledor, presiona duro hasta el punto de quiebre de su enemigo y ahí coloca rebases inesperados. El factor sorpresa que exhibe no viene solamente de su habilidad para cuidar las llantas y meterse a una estrategia.
Hace poco hacía algunas cuentas sobre las posiciones eventuales de una carrera, de dos y de tres. Esteban debería rondar por los lugares 14 o 16 en la clasificación final de un Gran Premio normal, pero eso podría ser mejor en cuanto sus sábados de calificación le coloquen más adelante, y en cuanto pueda poner en juego su propio factor sorpresa.
Yo pediría que Esteban termine carreras, que no choque y que tenga paciencia? la fortaleza ya está.
Paciencia y fortaleza