Fue el año perfecto, el que el soñaba, 8 victorias, dos segundos, un tercero, 9 poles, sufrió la rotura de caja en San Marino y Canadá, su otro abandono fue en Spa, en el recordado gran premio del desastre que tuvo involucrado 13 autos, en la reanudación tuvo un incidente y debió abandonar, sumo 100 puntos contra los 86 de Schumacher y todo parecía que iba a seguir así, puesto que Mclaren tenía un equipo como en sus mejores años, una gran dupla de pilotos y dos ingenieros de gran nivel en la parte técnica, también el neumático japonés había dejado bien claro que no llego a la F1 por marketing, en ese mismo año de su ingreso, la marca estadounidense Goodyear dejaba la categoría luego de dominarla a su antojo.
Para 1999 Newey-Oatley volvieron a darle un arma para pelear para mantener ese 1, el MP4/14 era un repaso de su antecesor, empezó la temporada con la pole en Australia pero problemas con su acelerador lo obligaron a retirarse, En Brasil fue pole y victoria, San Marino fue pole y accidente, fue podio en Mónaco, victoria en Montmelo y al otro gran premio en Canadá también volvió a ganar, para el próximo gran premio tuvo la peor clasificación corriendo para Mclaren, por culpa de la lluvia y no dar la vuelta justa en el momento justo partió 14to, logro llegar segundo de Frentzen en Magny Cours, fueron puntos muy valiosos que al final de temporada seguramente sí que se iban a notar, tuvo un problema con un neumático en Silverstone, tercero en Austria, en Hockeinheim tuvo un fuerte accidente, cuando era triunfo cómodo y de esa forma se escaparía en el mundial, el reventón de un neumático trasero lo hizo terminar contra las protecciones, triunfo en Hungría, segundo en Spa y venia peleando el mundial con un invitado que nadie tenía en cuenta, era un piloto de Ferrari pero no el por entonces bicampeón Schumacher, que por la fractura de su pierna en Silverstone, quedo al margen de luchar por el 1 y todo quedo en manos del Irlandés E. Irvine y tuvo como escudero a otro conocido de Mika, el otro Mika con quien tuvo duelos inolvidables, Salo era el elegido para ayudar a Irvine y lograr ese título, el bueno de Salo tuvo su momento de gloria en Hockeinheim, luego del abandono de Hakkinen el otro finlandés pudo ganar pero debió dejar la posición para Irvine quien así se ubicaba en la cima del torneo con 52 unidades, 8 más que Mika Hakkinen. Luego de los nombrados gran premios de Hungría y Bélgica llego Monza, todo venia perfecto hasta que Hakkinen cometió uno de esos errores que son recordado de por vida, un error de conducción lo hizo despistarse en la primera variante (chicane) del templo de la velocidad, fue la burla de muchos ya que se lo vio llorar como un chico, ahí el mundial quedo empatado en 60 con Irvine y con 50 puntos estaba Frentzen quien venía con un Jordán muy inferior pero sacando rédito de maniobras como la Mika, llega el gran premio de Europa en Nurburgring donde se vio la victoria sorpresa de Herbert y su Stewart-Ford, para Malasia se anunciaba el retorno de su archirrival, Schumacher retorno en Kuala Lumpur y Ferrari pasaba a ser muy fuerte, 1-2 de las maquinas de Maranello en clasifica hacía peligrar la punta del torneo, en carrera fue 1-2 para Ferrari pero con Irvine ganador, luego que Schumacher partiendo en pole por primera vez sintió lo que había sentido tantas veces Irvine y muchas más tiempo después Barrichello, dejo paso a quien en ese momento era el 1 del Team, quien hubiera imaginado que el Irlandés podía ser quien le diera a Ferrari ese título de pilotos que le era esquivo desde 1979. Ese domingo luego del gran premio las Ferrari fueron excluidas por irregularidades en su alerón delantero, pero luego se confirmo el triunfo de Irvine, entonces había que ir a Suzuka a definir y no había fallos posibles, Mika era segundo a cuatro puntos, 70 a 66 venia ese reñido mundial. Pole nuevamente para Schumacher, Mika parte segundo, en la largada el finlandés mostro muy claro que quería retener el 1 y así fue, solo dejo el liderato de ese gran premio cuando ingreso por caucho fresco, lidero 50 de las 53 vueltas y el bicampeonato fue posible, otra vez la emoción invadió al joven rubio que pocos días después al recibir el trofeo de ese título hizo una demostración en esa bicicleta de una rueda, esa misma que desde niño lo hizo ilusionar con ser un gran artista, pero claro que lo fue, pero del automovilismo.
El año 2000 iba por su tricampeonato, pero no fue posible, un año irregular y también la Ferrari de Schumacher ya era el mejor auto del mundial, logro cuatro victorias y dejo una de las mejores maniobras de la historia de la categoría, en Spa dejo el sello de un piloto especial, de alguien que tenía un talento natural muy alto, terrible maniobra para superar Schumacher con Zonta de testigo privilegiado, llego hasta Japón peleando para retener el 1, pero no fue posible.
2001 sería su último año, termino quinto ese mundial y con dos victorias en Silverstone e Indianápolis elevo a 20 sus victorias, también dejo 26 poles, 25 vueltas rápidas, 51 podios, 5 hat trick, 3 gran chelem eso que se otorga a quien logra vencer, hacer la pole, el record de vuelta y liderar de punta a punta, también sumo 62 abandonos en 161 grandes premios, donde en 48 fue líder al menos una vuelta, logro vencer en cuatro de punta a punta un rubro que domina Ayrton Senna con 19, tuvo a ocho compañeros de equipo donde la mayoría eran británicos, fueron 11 temporadas con dos equipo, conto con 15 modelos distintos de Lotus y Mclaren, tuvo cuatro motores y dejo muchos números más, pero lo más importante que logro ser lo que él quería, un ARTISTA y aunque debió cambiar las cuatro ruedas por una dejo bien claro que lo único lento que tenia era Clarence su tortuga que siempre lo esperaba en Montecarlo.