Jenson Button: "Me gusta el reto de que me comparen con Alonso"* El piloto de McLaren charla con EL PAÍS en el circuito de Silverstone y analiza las dificultades por las que atraviesa la escudería de Woking.Hubo un tiempo, a principios de la década de los 2000, en el que Jenson Button (Gran Bretaña, 1980) era lo más. Un veinteañero con pintas de modelo que llegaba al Mundial para comérselo. Y aunque tardó nueve años en lograrlo, a día de hoy, apurando sus últimos kilómetros en la F-1 al volante de un McLaren que flojea por todos lados, el británico tiene el reconocimiento de todo el "paddock". En Silverstone, donde la escudería de Woking afronta esta tarde (14:00 horas, Antena 3, Movistar TV y TV-3) su gran premio de casa, tanto él como Fernando Alonso, su compañero, arrancarán desde las catacumbas de la parrilla después de quedar eliminados en la primera criba de la cronometrada de ayer.
Pregunta. Cuando aterrizó en la F-1, Briatore dijo de usted que jugaba demasiado al golf en vez de entrenar. ¿Le satisface haberle demostrado que se equivocaba?
Respuesta. Siempre hay gente a la que le gusta criticar. Todos cometemos errores y es evidente que soy mucho mejor ahora que entonces. En todos los aspectos, no sólo en la conducción. A los 20 años había muchas cosas que podían atraerme al margen del coche. Es normal que Flavio tratara de dejarme en evidencia para que me centrara en aquello que realmente importaba. Estoy de acuerdo en que no estaba suficientemente focalizado en ello. De todo se aprende.
P. ¿Cuanta cuerda le queda?
R. Cada vez que me subo a un F-1 trato de hacer mi trabajo mejor que la última vez. No ha cambiado nada. Te haces mayor, te salen arrugas, pero quieres ganar, el hambre siempre está allí. Cuando eso se va es cuando tienes que dejarlo.
P. ¿De dónde saca la motivación?
R. Es difícil. Desde dentro ves los pasos que se han dado, aunque hay veces que no se da ninguno y eso es duro. Las últimas dos carreras han sido muy complicadas porque hemos dado un paso atrás, tanto en términos de rendimiento como en fiabilidad. Honda empezó muy por detrás de los demás constructores en desarrollo, y hora estamos como en una pretemporada, entrenando, y por eso probamos cosas que, en según qué casos, no funcionan. Hay que vivir con ello. Mercedes necesitó mucho tiempo antes de ganar la primera carrera y antes de proclamarse campeón. Con un poco de suerte a nosotros no nos costará tanto.
P. Después de todos los mensajes de optimismo lanzados desde McLaren hasta hace bien poco y cómo están las cosas, ¿entiende que haya mucha gente que no les crea?
R. ¿Sugiere que miento?
P. No usted. Ron Dennis y Eric Boullier aseguraron que estarían en condiciones de ganar carreras, y llegados a la mitad del calendario, detrás de ustedes sólo están los Manor.
R. Sí, pero yo nunca dije eso de lo que me habla.
P. De hecho, hace unos días reconoció que, de seguir así, ni siquiera el año que viene podrán pelear con los de delante.
R. Es evidente que si estamos a dos segundos de la cabeza cuando termine el curso, tampoco podremos plantearnos ganar en 2016.
P. A eso voy cuando le pregunto si entiende que haya gente que ya no crea según qué promesas.
R. ¿Qué puedo decirle? Nunca es fácil dar caza a equipos como Mercedes o Ferrari, y menos hacerlo rápido. De mi boca nunca salió que fuéramos a ser competitivos este año, a lo mejor hubo quien sí lo dijo. No tengo otra respuesta. Yo sabía que iba a ser una temporada muy difícil pero no me planteaba cuánto. Simplemente agachas la cabeza y trabajas. Ahora estamos muy lejos, pero si hasta el final ganamos un segundo o un segundo y medio, eso supondrá un avance tremendo. Ferrari ganó mucha potencia este invierno con su motor, no sé cuánto pero puede que más de 60 caballos. O sea que es posible.
P. Se podría decir que usted y Alonso están haciendo el trabajo sucio. ¿Le preocupa que cuando consigan que todo funcione pueda ser otro piloto el que saque tajada?
R. Así es la vida. ¿Quién lo sabe? Ni siquiera sé qué voy a hacer el año que viene. No tiene sentido que miremos tanto al futuro porque nadie sabe qué le depara. Creo que es una de las mayores debilidades de las personas, que miramos demasiado lejos. El año pasado (murió su padre) entendí que hay que vivir el momento.
P. Usted ya trabajó con Honda en el pasado. ¿Esto se parece en algo a aquello?
R. Esta F-1 y aquella, la de los V8 y V10, no tienen nada que ver. Aquellos motores V10 eran increíbles. Recuerdo mi primera "pole", en Ímola (2004), fue increíble. Ahora es mucho más complicado recuperar el terreno porque hay mucha más complejidad tecnológica y muchas más restricciones. Incluso cuando has solventado los asuntos relacionados con la fiabilidad, conseguir extraer el máximo potencial puede suponer mucho tiempo. Este motor es muy agresivo conceptualmente por cómo se ha integrado en el monoplaza. Es incluso más agresivo que el Mercedes. Si hubiéramos sido más conservadores, probablemente ahora seríamos más rápidos pero nunca llegaríamos a su nivel.
P. ¿Cómo vive uno al ser comparado constantemente con Alonso?
R. Fernando tiene mucha experiencia y la información que transmite y comparte conmigo es muy buena. Los dos tratamos de llevar esto hacia delante. Yo intento ganarle a él y él de ganarme a mi, pero muchas veces llevamos coches distintos porque lo estamos desarrollando y disponemos de elementos diferentes. Cuando uno está metido en una situación tan delicada como la nuestra siempre quiere tener al lado un compañero que sea competitivo, y es evidente que eso lo tengo. Me gusta el reto de que me comparen con él.
P. ¿Comparte la opinión de aquellos que aseguran que la F-1 de hace 15 años era mejor?
R. Los coches de hace 15 años eran mejores. Eran más rápidos, tenían mucha más potencia, mucha más adherencia, estaban los repostajes, los tiempos por vuelta eran unos ocho segundos más bajos. Lo importante es que las cosas están cambiando. La F-1 siempre ha sido centro de críticas. Lo bueno que se nos presentan cambios significativos a la vuelta de la esquina, pero queremos que esos cambios se implanten ahora y no dentro de 10 años.
Fuente: ElPaís.com