Heroico doblete
Jo Ramírez
9 Abr. 07
En la moderna era en la que vivimos, llena de tecnología, es muy refrescante notar que el valor humano tiene todavía mucho que ver en el resultado final.
Un deslumbrante Fernando Alonso nos enseñó nuevamente por qué es el campeón mundial. Después de un arranque perfecto no necesitó usar sus espejos porque nadie lo amenazó.
Sólo se necesita ver a su viejo equipo Renault, que ni siquiera se colocó entre los 10 primeros en la calificación. Ni ellos mismos esperaban notar tanto la tremenda falta que les hace Alonso.
En el primer Gran Premio Fernando aún no encontraba su lugar con las nuevas cubiertas Bridgestone, después no estuvo en las pruebas la semana pasada y pensé que eso le afectaría. Pero por lo contrario, el descanso le ayudó.
McLaren también realizó un enorme esfuerzo y mejoró el auto entre las dos carreras. A mi modo de ver, Ferrari aún tiene el mejor auto, pero ayer McLaren supo administrar el suyo mucho mejor.
La arrancada fue un sueño con Hamilton haciendo un increíble despeje por dentro de un Ferrari y por fuera del otro para subir de cuarto a segundo en un par de curvas, con un auto que visiblemente se coleaba mucho pero que pudo resistir los ataques de Massa, que parecía un principiante y que sus errores lo relegaron al quinto lugar.
Gracias a este heroico manejo de Hamilton, Alonso se ganó una ventaja de más de 15 segundos antes de su primer parada.
En la parada de Hamilton se pudo reajustar el ala delantera, y en la segunda parte de la carrera Hamilton volaba y acortaba distancia con Alonso, alejándose de Raikkonen y Heidfeld.
En la detención final, con las llantas duras, el auto de Hamilton no respondió y empezó a perder los 12 segundos que mantenía con Raikkonen, quien llenó sus espejos apareciendo más y más grande hasta la última curva. Lewis manejó como un veterano, dándole el 1-2 a McLaren que ya necesitaba.
Una vez más, como en años anteriores, después de esta carrera podemos apreciar que será una batalla entre Ferrari y McLaren, con BMW recogiendo las migajas de la mesa.
A Renault le tocará sólo lo que llegue al suelo, después de otra decepcionante actuación como campeón del mundo.
Honda fue una vergüenza. Después de ganar su primera carrera el año pasado, ahora hace el ridículo.
Tal vez sea sólo una coincidencia, pero ahora de los dos equipos japoneses parece que es Honda el más cercano a cometer el “harakiri”.
Y qué bueno que la próxima carrera será la próxima semana, días porque todo indica que sera otro magnífico año de Grandes Premios.
Hasta la próxima.