Fernando Alonso tenía en Brasil su primera oportunidad para coronarse campeón del mundo. Le bastaba con ser tercero para llevarse el título. El único piloto que podía discutirle el título a Alonso era Raikkonen, que tenía que ser primero y esperar que el español no se subiera al podio para poder seguir luchando por el título en las dos carreras que quedaban para finalizar la temporada.
El primer título de una leyenda
BRASIL 2005 Alonso se corona campeón del mundo en el circuito de Interlagos | El español acabó tercero tras los dos Mclaren | Primer título para un español en la historia de la Fórmula 1
El 25 de Septiembre de 2005, la Fórmula 1 llegaba a Interlagos para celebrar el GP Brasil. Aún faltaban dos carreras para terminar la temporada, pero había un piloto que estaba más ilusionado para que comenzara la carrera. Ese piloto era español, militaba por aquella época en Renault y su nombre era Fernando Alonso.
El asturiano salía desde la pole, y quería ir a por la victoria para que la carrera fuera aún más especial, para redondear el mejor día de su vida. En la salida, Fernando conservó su posición, manteniendo a raya a Montoya y preocupándose de no tener problemas. El safety car se vio obligado a salir en la primera vuelta debido a los trozos que había en medio de la recta tras el accidente entre Coulthard y Pizzonia.
Salida de la carrera, comandada por Fernando Alonso
El otro protagonista de la salida fue Kimi Raikkonen, que tenía que ser primero y esperar que Fernando no subiera al podio para seguir conservando sus opciones para llevarse el título. El finlandés nos regaló una gran salida, pasando de la quinta a la tercera posición, colocándose por detrás de Alonso y de su compañero en Mclaren, Juan Pablo Montoya.
Las opciones de conseguir la victoria de Alonso se esfumaron muy pronto. Nada más marcharse el safety car, en la tercera vuelta, Montoya, tras un error del asturiano en la primera curva, lograba pasar al de Renault, que parecía que se apartaba para evitar problemas con el colombiano. Ahora era segundo, pero nada había cambiado, se seguía llevando el título.
Era una época dónde los motores sonaban, donde los coches eran más fiables que ahora y dónde en cada parada los coches necesitaban pasar también por la gasolinera. En aquella época había más coches en pista, la parrilla estaba más poblada que ahora, con escuderías como Midland, Jordan o Toyota.
Las vueltas seguían pasando, y nada cambiaba. El Mclaren de Montoya se iba alejando poco a poco de los ojos de Fernando, mientras que el español lograba mantener por detrás a Kimi Raikkonen. Llegó el momento de las paradas y nada cambió. Poco a poco iba quedando menos para la bandera de cuadros, menos para que Alonso cumpliera su sueño de proclamarse campeón de Fórmula 1.
Tras la segunda parada, el finlandés de Mclaren consiguió pasar al español de Renault, que solo pensaba en terminar la carrera y conseguir el título que le convirtiera en leyenda. En las últimas vueltas pudimos ver un interesante entre Montoya y Raikkonen por llevarse la victoria. Los dos compañeros lucharon por una victoria que se acabó llevando el colombiano.
Y llegó el momento, el momento en el que Alonso cruzó la línea de meta y se proclamó campeón del mundo. Le bastaba con ser tercero y el cumplió. Ya no había marcha atrás. El español lo celebró en el coche, saludando a la grada y llorando dentro del casco.
Por detrás de los tres hombres del podio acabó Michael Schumacher, que esa temporada no pudo añadir otro título a su palmarés. Tras cinco temporadas de éxitos, ni el alemán ni Ferrari pudieron seguir la estela de Alonso y de Renault.
Ahora llegaba el momento de Alonso. Nada más bajarse del coche, se abrazó a sus mecánicos, porque ellos también eran parte de ese título. En el podio, disfruto como el que más, siendo la vez que más disfrutaba bañándose en champán. Fue el primer título para un español en la Fórmula 1. Sería el campeón del mundo más joven de la historia, hasta que Vettel le quitara ese record en 2010.
Tras la carrera en Brasil, aún faltaban dos carreras más para cerrar la temporada. En Japón, el asturiano fue tercero en una carrera que ganó Kimi Raikkonen saliendo desde la decimoséptima plaza. En China, la carrera que despedía la temporada, se llevó la victoria para poner el broche a una temporada perfecta, una temporada en la que comenzaba una leyenda.
La frase: ?Toma, toma, toma? Fernando Alonso.
Publicado 1 week ago por Guillermo Córdoba
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