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TRABAJO EN EQUIPO

El poder de una parada en boxes

El poder de una parada en boxes

Manuel Andrés Nieves   14 de Septiembre 2010 16:45

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El poder de una parada en boxes

En la Fórmula 1 cada décima de segundo cuenta, y puede decantar toda una carrera a tu favor o a tu contra. Arañar el máximo tiempo posible es el objetivo principal en este deporte, y a ello no sólo contribuye el trabajo de los ingenieros a la hora de diseñar el monoplaza y el del piloto a la hora de poner sus habilidades en pista, sino también el de los mecánicos, encargados de hacer que una entrada a boxes tenga poco de detención y mucho de velocidad.

Los cambios de neumáticos han cobrado una importancia vital esta temporada, al ser una parte fundamental de las estrategias de los equipos que ha de resolverse en poco más de tres segundos. La escudería Ferrari nos ha dejado un claro ejemplo en el Gran Premio de Italia, donde lograron una victoria de equipo gracias en buena medida a una veloz parada en boxes.

El propio Fernando Alonso, beneficiado de dicha acción al lograr así su tercera victoria del año, reconoció este hecho tras la carrera, comentando: "Creo que ha sido la parada más rápida de mi vida. Casi no he tenido tiempo de tocar todos los botones y ellos han cambiado las cuatro ruedas. Eso es impresionante."

No le falta razón, ya que el tiempo empleado por los dieciséis miembros encargados de dicha operación fue de 3.4 segundos. Dos encargados de levantar el coche en la parte delantera y trasera, uno vigilando el tráfico en la calle de boxes y tres hombres por rueda, todos ellos para devolver a pista a sus pilotos con celeridad. Un crono por encima de la media del equipo en la temporada, que sitúan en 3.7 segundos.

Sin embargo, Fernando se equivoca cuando hace mención a su parada más rápida, ya que ésta tuvo lugar en Canadá, con un tiempo de 3.3 segundos que le permitió salir por delante de Lewis Hamilton cuando ambos cambiaron sus gomas en la misma vuelta.

Diego Ioverno, jefe de operaciones en carrera, ensamblaje del monoplaza y caja de cambios, comentó que "hemos trabajado muy duro este año para mejorar el procedimiento de cambio de ruedas lo máximo posible. Hasta el final de la pasada temporada, era la duración del repostaje lo que determinaba el tiempo de la parada y los mecánicos trabajaban en el cambio de ruedas con un razonable margen de seguridad, a pesar de que hablamos de sólo unos segundos. Hoy, el más mínimo error es penalizado. Puedes decir que es mucho más fácil perder una carrera en la parada en boxes que ganarla gracias a ella."

El poder de una parada en boxes

Todo debe encajar a la perfección, cual piezas de un puzzle, para optimizar un proceso hoy en día mucho más complejo que antaño. Echemos un vistazo al ejemplo que venimos analizando, observando cada detalle décima por décima, justo después de que Fernando detuviese su monoplaza milimétricamente en en lugar especificado:

+0"35: El monoplaza es levantado por los dos hombres situados en la parte delantera y trasera.

+0"70: Las ruedas con neumáticos blandos son retiradas.

+1"40: Las ruedas con neumáticos duros están en posición.

+2"30: Primera rueda colocada y mano alzada para confirmación.

+2"60: Segunda rueda colocada.

+2"70: Tercera rueda colocada.

+2"90: Cuarta rueda colocada.

+3"40: Coche al suelo y luz verde.

¿Qué hace que este tipo de proceso sea posible en tan corto período de tiempo? Ioverno explica que "hay dos secretos, si podemos llamarle así: entrenamiento y práctica constante. Desde el inicio de este año hemos hecho alrededor de 1300 prácticas de pit-stop, tanto en el circuito como en la fábrica. En las semanas en las que no hay Gran Premio, entrenamos tres veces, haciendo cerca de treinta simulaciones por día. En el circuito, trabajamos desde el jueves hasta el sábado, abordando el fin de semana como si fuésemos un equipo de fútbol: el día anterior, algunos ajustes, y el domingo, relajación antes del partido. Es importante que los chicos reciban las instrucciones de manera tranquila, sin sentirse perturbados. Son perfectamente conscientes de la gran responsabilidad que tienen en sus manos, especialmente en carreras como la de ayer. No tiene sentido decirles que se den prisa, pues eso sólo lleva a errores."

Además del personal encargado de trabajar en una parada normal en boxes, existen otras ocho personas preparadas para tareas extra cuando el monoplaza se detiene. Un hombre al lado de la parte frontal en caso de que se necesite cambiar el morro, dos preparados para modificar el ángulo de incidencia del alerón delantero, uno con el arrancador en caso de que el motor se detenga y otros cuatro con otro juego de neumáticos en caso de que los dos pilotos del equipo paren al mismo tiempo.

El poder de una parada en boxes

El equipo se selecciona de entre un grupo de treinta personas, todas con tareas asignadas tanto en la fábrica como en la pista. La elección de lo que Ferrari define como su "equipo de fútbol" es importante de cara a arañar décimas de segundo. Una de las novedades que el equipo italiano ha introducido a mediados de la temporada ha sido la posibilidad de que el hombre que levanta el monoplaza en la parte delantera pueda desplazarse lateralmente antes de dejarlo caer, un pequeño cambio con el que se puede obtener una salida más rápida. En éste y otros aspectos se empezó a trabajar ya en la fase de diseño del monoplaza. El semáforo es otra modificación, introducida en los últimos años, que en Ferrari consideran clave a la hora de obtener beneficio de tiempo.

Sin embargo, Ioverno hace hincapié en el factor humano como la parte fundamental de la operación: "Un pit-stop es como un ballet, interpretado con la banda sonora de un motor, en el que un grupo de personas tiene que operar en perfecta armonía con ellos mismos y con el bailarín estrella, el piloto situado en el cockpit. El éxito de la operación también depende mucho de él. Es crucial que siempre se detenga en el lugar exacto definido con anterioridad, o de lo contrario perderás valiosas décimas, porque veinte centímetros más o menos significan que todo el equipo ha de desplazarse. Cada papel requiere sus características físicas y mentales. Por ejemplo, los chicos que levantan el monoplaza han de ser bastante fuertes. Aglidad, tranquilidad y rápidos reflejos son los requerimientos clave para quienes realizan el cambio de ruedas, especialmente los hombres de las pistolas, ya que su trabajo requiere habilidades técnicas que están lejos de lo simple."

"En entrenamientos hemos conseguido estar cerca de la barrera de los tres segundos, pero lo que cuenta es la carrera y por eso la actuación de Monza fue increíble. Cuando di a los chicos las órdenes de salir del garaje eran conscientes de que la victoria podía depender de sus acciones. Lo hicieron y puedes ver el orgullo y satisfacción en sus caras. Cuando Fernando cruzó bajo la bandera a cuadros pudieron expresar su satisfacción y la de todo el equipo."

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