Pedro de la Rosa está ansioso por pisar el asfalto italiano: "La última vez que corrí en Monza fue en 2006. Esta pista es un clásico, tiene mucha personalidad y es diferente a cualquier otra de las que corremos. Esto es lo que me gusta mucho de Monza, ya que con todos los circuitos modernos, hoy en día es excepcional encontrar uno que sea único."
La pista es muy dura para los coches: "También tienes que pilotar de manera diferente a cualquier pista de carreras. Es evidente que las velocidades son muy altas, se corre con baja carga aerodinámica, tiene frenadas muy fuertes y necesitas cortar las chicanes. Todo esto junto hace que sea muy exigente, especialmente para los motores, frenos y suspensiones."
Reconoce las carencias de su monoplaza, pero no lo da todo por perdido: "Definitivamente no va a ser un fin de semana fácil para nosotros, ya que no hay ninguna parte se adapte bien a nuestro coche. Pero hemos demostrado, por ejemplo en Budapest, que también podemos hacerlo bien en los lugares que teóricamente deberían ser difíciles para nosotros. Siempre me gusta ir a Italia y estoy esperando con interés la carrera."Su compañero, el japonés Kamui Kobayashi, conoce el circuito de las categorías inferiores y está encantado de volver allí ahora con la F1: "Tengo muy buenos recuerdos de Monza, ya que fue allí donde gané el Campeonato de la Fórmula Renault Eurocup en 2005, y también he competido allí en la GP2. Es un circuito de muy alta velocidad, con un montón de frenadas fuertes."
"Me gusta bastante, aunque creo que será difícil para nuestro coche. Tendremos que encontrar las mejores soluciones y asegurarnos de que todo va bien el fin de semana, no cometer errores y así optimizar nuestras posibilidades. Sin duda, mi objetivo es sumar algunos puntos más antes de ir a Asia."