"Los problemas económicos han dificultado la evolución del monoplaza. Podemos mantener vivo al equipo para lo que queda de año, pero no podemos traer mejoras interesantes cada fin de semana, como hacen otros equipos. Pocas escuderías tienen garantizada su presencia para el año que viene, y nosotros no somos una de ellas, la Fórmula 1 es así de dura."
Senna reconoció que la situación del equipo cambió mucho desde que firmó su contrato hasta que comenzó la temporada:
"Sabíamos que entrar en un equipo nuevo suponía un gran riesgo, y firmamos un contrato sin saber lo que nos depararía el futuro. Hemos pasado por un gran proceso de aprendizaje: Empezamos el año sin realizar ningún test, hemos sacado el máximo partido posible del coche, actualizado pequeñas cosas… cada fin de semana, aprendemos algo nuevo."El brasileño también comento que el equipo estaba en negociaciones con Toyota para poder usar partes de su antiguo coche, pero que también era difícil:
"Mantenemos conversaciones con Toyota, pero no sabemos cómo saldrán las cosas. Hispania necesita la homologación de la FIA para poder usar esas piezas, es un poco complicado."