Todo esto es aún más sangrante si tenemos en cuenta que Mercedes GP ha introducido varias mejoras este fin de semana con la idea de escalar en parrilla (la más importante es el nuevo fondo), pero ni con esas Schumacher sale de su bajo estado de ánimo, tal que no ha podido cumplir las predicciones que tenían de antemano. "Si un coche funciona, una vuelta sale perfecta, y por desgracia nuestro coche no va nada bien aquí", declaró nada más bajarse y finalizar décimo.
"El tema es que realmente no tenemos la velocidad que poseemos normalmente, por lo menos los viernes. Así que tendremos que trabajar para descubrir cuáles son las razones si es que las hay, o si simplemente....no tiene solución".
La nota curiosa de sus declaraciones vino cuando se le preguntó si podrían identificar la raiz del problema, a lo que el heptacampeón no pudo responder de otra manera sino medio en broma: "si lo supiéramos no estaría aquí"."Creo que lo que hemos puesto en el coche es mejor que el paquete de Silverstone, pero parece que no funciona correctamente en Budapest".