
"Es necesario que haya algunas pruebas con el nuevo proveedor, cualquiera que sea, y creo que a finales de verano o principios del invierno tendrá que haber algunos test, aunque eso no significa volver al programa anterior porque sería insostenible", declaró Ross Brawn, en nombre de los equipos.
Si el retraso en la elección del sucesor de Bridgestone está complicando las cosas a los equipos que ya trabajan en el diseño de sus monoplazas para la próxima temporada, la prohibición de entrenamientos hasta el mes de enero dificultaría más la situación.
"Los equipos han elaborado juntos las especificaciones técnicas de los neumáticos que desean," recalcó Brawn. "Ahora tenemos que continuar el desarrollo de nuestros coches y los estamos diseñando con arreglo a los actuales neumáticos, ya que no disponemos de otra información".