Ecclestone espera que la F1 vuelva a establecerse permanentemente en el país americano, pues es un gran mercado que el deporte necesita. A partir de 2012 los monoplazas rodarán sobre suelo estadounidense (en una nueva pista que diseñará Hermann Tilke) y se desea que lo hagan por muchos años.
Sobre el GP de Turquía, al que cada año acuden menos espectadores, Bernie aseguró que se quedará en el Calendario, aunque vence contrato esta temporada. En este momento está negociando una renovación por 10 años más.
El magnate británico está pendiente de la situación política que vive actualmente Corea del Sur, país que debutaría esta temporada en la F1, pero que podría entrar en guerra con su hermana del norte en los próximos meses: "Si hay un problema serio allí, no vamos a estar, obviamente."Ya por último, se mostró confiado respecto a que los equipos alcancen un acuerdo sobre el nuevo suministrador oficial de neumáticos de la categoría antes de que termine el fin de semana. Casi con toda seguridad, la marca elegida será Pirelli.