La clave para que Pirelli haya sido la escogida es que los equipos no quieren el retorno de la guerra de neumáticos entre dos marcas, que marcó la competición a mediados de la década cuando Bridgestone y Michelin se repartían los equipos de la prarilla.
Quien ha resumido el sentimiento de los equipos ha sido Adam Parr, dirigente del equipo Williams. "Nadie en Fórmula 1 quiere eso (la guerra de neumáticos). Tener la guerra de neumáticos hará que la presión para aumentar los entrenamientos aumente".
"No es cuestión de dinero, estamos hablando de espectáculo", comentaba Parr. "Si a alguien gana dos segundos por vuelta por el rendimiento de sus neumáticos, no los volverás a ver. Eso mataría el deporte".Se cree que el anuncio oficial se hará la próxima semana y los equipos están dispuestos a presionar para que se habiliten varias jornadas más de entrenamientos en la próxima pretemporada para probar los nuevos neumáticos.