"Obviamente asbíamos que el coche no era malo, que tenía consistencia, pero teníamos la incógnita acerca del comportamiento de los neumáticos", declaró Boullier. "Ahora sabemos que podemos ser algo más agresivos".
Boullier cree que el podio logrado, teniendo en cuenta todo el lío reciente con el famoso caso Crash Gate que os estamos desmenuzando en F1 al día, ayudará a que el personal de la empresa arrime el hombro. "Creemos que nuestro coche tirne ritmo más que suficiente para rodar justo por detrás de los cuatro equipos más potentes, así que cualquier error de los de arriba hará que sumemos muchos puntos".
"No puedo estar más orgulloso del trabajo hecho en Enstone y en Viry-Chatillon tanto en estos meses como en invierno, y es bueno que sumemos puntos y hagamos podios. Hemos logrado el objetivo, para la moral sin duda es algo muy beneficioso."El invierno fue duro para Renault con la polémica de Singapur y los continuos rumores de que Carlos Ghosn, presidente del grupo Renault, iba a cerrar el grifo de la F1, hasta que apareción el grupo inversor Genii que compró el equipo. Al respecto de esto, Boullier dijo que "por supuesto que fue difiícil ya que los empleados de la fábrica son gente de carreras".
"Cuando no obtienes resultados te sientes muy jodido. Tuvimos todos los líos del invierno, el cambio de control en el equipo – algo que se advirtió desde hace meses, pero que no hizo bajar la cabeza a la gente, que trabajó como mejor pudo.Así que estar en el podio es algo enorme para ellos."