Pese a que la sanción deportiva ya ha sido efectiva (la FIA condenó a McLaren a pagar 72 millones de euros y la pérdida de los puntos del Mundial de Constructores), la denuncia realizada a la justicia ordinaria continúa su camino natural. Así, y tal y como se les notificó en el Gran Premio de Italia, la plana mayor de McLaren debe comparecer aún ante el fiscal Tibis. Concretamente, aún deben ir a declarar son Ron Dennis, número uno de la escudería McLaren; Martin Whitmarsh, administrador delegado; Paddy Lowe, director de los ingenieros, y Jonathan Neal, director general.