"He pasado los últimos meses evaluando cuidadosamente las opciones para este año", comentó el hijo de Nelson Piquet en su página web. "Tenía que elegir un camino y fue una decisión difícil de tomar. La NASCAR es un reto enorme".
"Tener éxito en la Fórmula 1 siempre fue mi meta, pero he aprendido que la felicidad es tan importante como la ambición y después de que mis primeros 18 meses en la Fórmula Uno no salieran según lo planeado, he decidido concentrarme en algo diferente y he optado por marcharme a Estados Unidos," explica el joven de Heidelberg.
"Voy a extrañar Europa y a todos los amigos que tengo aquí, pero siempre tendré mis éxitos de los que estoy orgulloso. Quiero aprovechar esta oportunidad para agradecer a cada persona que me ha apoyado en mi carrera hasta ahora en Europa, especialmente a mi equipo en la GP2 y los chicos de Renault, os hecho mucho de menos chicos"."Estoy seguro de que todavía haremos algunas carreras en Europa, tengo un montón de ambiciones en mi vida, uno de los cuales ha sido siempre poder ganar las 24 Horas de Le Mans," concluye Piquet, abriendo la puerta a una posible vuelta en un futuro.