
"Como en 2009, hemos decidido no afrontar los primeros entrenamientos con el coche nuevo, por lo que se incorporará en la segunda prueba," explica Christian Horner, jefe de equipo, que justifica esa decisión en que el RB6 necesita más tiempo en el túnel de viento.
"Lo hacemos para optimizar el tiempo en el túnel de viento tanto como sea posible", dijo Horner. "Obviamente, el coche es mucho más que una evolución del coche del 2009 después del cambio de normas que tuvimos en la temporada pasada".
"Con el cambio en el tema del combustible, hemos optado por dar a nuestros diseñadores de tanto tiempo como sea posible," reconoce Horner, cuyo equipo terminó en segunda posición del campeonato del mundo de constructores en 2009.