En el primer día la climatología no acompañó, y solo pudo completar 30 giros. Ayer el tiempo dio una tregua, y Massa realizó 60 vueltas. Indudablemente el objetivo no era marcar registros competitivos, sino sentirse a gusto y sin ningún tipo de molestia al pilotar.
Según nos cuenta Felipe, la meta se ha logrado.
"Aunque piloté un coche completamente distinto al del próximo año, tuve unas sensaciones perfectas, lo que me da esperanzas de cara a la nueva temporada. Fui rápido enseguida, nada parece haber cambiado en mi estilo de conducción comparado con antes del accidente, dijo Massa.
Quiero gradecer a Ferrari este regalo que, junto con mi hijo, hacen estas Navidades incluso más especiales", concluyó Felipe.Recordemos que Massa probó con un coche de hace dos temporadas y usando neumáticos de exhibición, siguiendo la normativa de la FIA.
