El italiano, que será sin duda una de las personas que más molestas se sentirían con si finalmente el alemán retorna a las pistas con el equipo Mercedes, lo ha explicado claramente. "No, el contrato no es vinculante," explicó Montezemolo.
"Está claro que si decide emprender otro camino nuestro contrato con él como asesor no será válido, es lógico. No se puede trabajar con un competidor y con nosotros al mismo tiempo", dijo Montezemolo a Reuters en una entrevista.
"Todavía no he hablado con él sobre ello," explica el dirigente de Ferrari, que quita importancia al puesto de Michael en Ferrari. "No es más que un querido amigo, no un miembro del equipo. Es un consultor para nuestros coches de carretera."A pesar de estas palabras, debemos recordar que Ferrari ha estado presionando a la FIA para que apruebe su plan de sacar a pista un tercer coche por equipo, que como comentó Montezemolo hace unos meses, hubiera sido para el veterano campeón alemán.
