Y es que no es fácil pasar de hacer podios con un fabricante como Toyota a ocupar con muchas probabilidades un puesto en las últimas filas de la parrilla de 2010, pero también tenemos que recordar cómo llegó Glock a la F1, ya que ésta se produjo a los mandos de un Jordan allá por el año 2004, cuando el equipo irlandés afrontaba sus últimas carreras antes de ser vendido al empresario Alex Shnaider.
Glock declaró en Auto Bild que este traspaso será bueno en el futuro. "Algunos ya han dicho que esto es el principio del fin. Pero he tenido muchos altibajos en mi carrera, y puedo ver con claridad lo que puede pasar. Desde mi punto de vista la Fórmula 1 está volviendo a sus orígenes, con los equipos privados".
Sin embargo, en un ejercicio de sensatez, Glock admitió que el éxito de Manor no será inmediato, pero reúnen las condiciones para lograrlo. "Existe una buena combinación de juventud, motivación y experienca en el equipo. Quiero hacerme valer con ellos y progresar juntos"."Está claro que algunos nos señalarán y se reirán de nosotros", reconoció Timo. "Los resultados llegarán en dos o tres años. Pero si me preguntas al respecto, te diré que es más reconfortante trabajar en el desarrollo de un equipo pequeño que simplemente sentarse en un coche ganador".