En concreto, Andy Fuchs, jefe de márketing y comunicaciones de la compañía, el encargado de transmitir esta tarde a la agencia de noticias alemana DPA que sólo se quedarán 150 de toda la plantilla que conformaba el grupo de gente dedicada a F1.
Estos 150 "supervivientes" tendrán una nueva serie de objetivos, centrados principalmente en la preparación de turismos y desarrollo de coches ajenos a la F1.
Fuchs también aseguró que los quinientos despedidos irán cobrando progresivamente los salarios e indemnizaciones pertinentes en el plazo de un año, dada la crisis actual.